Un poderoso sismo de magnitud 7,1 sacudió este miércoles el noroeste de la isla de Luzón, al norte de Filipinas, y provocó la muerte de cuatro personas, además de al menos 16 heridos y daños en numerosos edificios históricos de la región.
Filipinas suele ser sacudido por sismos debido a su ubicación en el "Anillo de Fuego", un arco de intensa actividad sísmica que se extiende de Japón al sureste asiático y la cuenca del Pacífico.
Un poderoso sismo de magnitud 7,1 sacudió este miércoles el noroeste de la isla de Luzón, al norte de Filipinas, y provocó la muerte de cuatro personas, además de al menos 16 heridos y daños en numerosos edificios históricos de la región.
El ministro de Interior filipino, Benhur Abalos, informó en rueda de prensa, concedida al lado del presidente del país, Ferdinand Marcos Jr., del fallecimiento de dos personas en la provincia de Benguet (una de ellas tras el derrumbe de un edificio), una en Abra y otro ciudadano en La Montaña.
Agregó que por lo menos otras 16 resultaron heridas tras los fuertes temblores, aunque no brindó mayores detalles sobre su estado de salud u operaciones de rescate.
"Por la magnitud del terremoto estamos hablando de un gran terremoto y podríamos esperar daños significativos", señaló Abalos en la rueda de prensa, que tuvo lugar en el palacio presidencial Malacañan de Manila.
La sacudida, registrada a las 8:43 hora local, tuvo su epicentro en una zona montañosa de la provincia de Abra, afectó a unas 15 ciudades y causó graves daños a por lo menos 179 edificios, 29 carreteras y tres puentes. También se sintió en la capital, Manila, donde sorprendió a los residentes que tuvieron que desalojar algunos edificios por precaución.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), que registra la actividad sísmica en todo el mundo, situó el sismo a 10 kilómetros de profundidad y a unos 12 kilómetros al este de la población de Dolores, con unos 32.500 habitantes.
En Vigan, situada a unos 400 kilómetros al norte de Manila y a unos 45 kilómetros del epicentro del terremoto, la catedral, que data del siglo XVI, en la época colonial española, ha sufrido "daños importantes" en su fachada.
En la misma ciudad, reconocida como patrimonio de la humanidad por la UNESCO y la urbe colonial española mejor preservada de Filipinas, otros edificios históricos y conjuntos arquitectónicos sufrieron importantes desperfectos tras el fuerte temblor y las posteriores réplicas.
En vídeos publicados en las redes sociales, además, se aprecia la caída de piedras y cascotes de la torre vigía de Bantay, en la provincia de Ilocos Sur, construida por los españoles en 1590 para el avistamiento de piratas e invasores.
El Campanario de Laoag, construido por los Agustinos en 1612 en esta ciudad de la provincia de Ilocos Norte, ha quedado destrozado por el sismo, indicó la senadora Imee Marcos en un mensaje a los medios locales.
Filipinas suele ser sacudido por sismos debido a su ubicación en el "Anillo de Fuego" del Pacífico, un arco de intensa actividad sísmica que se extiende de Japón al Sureste Asiático y la cuenca del Pacífico y en la que cada año se registran unos 7.000 movimientos telúricos, la mayoría moderados.