Lunes 11.7.2022
/Última actualización 22:56
El telescopio James Webb, el más potente lanzado por la NASA, captó imágenes sin precedentes de galaxias remotas, nebulosas brillantes y un lejano planeta de gas gigante. El acontecimiento fue presentado este lunes por el presidente estadounidense, Joe Biden, su vice, Kamala Harris y los integrantes de la agencia espacial norteamericano.
"Es solo un trozo de cielo de aproximadamente el tamaño de un grano de arena", dice el comunicado de la NASA que anunciaron las primeras imágenes del telescopio.
No vemos el presente, vemos el pasado: 4600 millones de años atrás en el tiempo, más específicamente. Es que las capacidades infrarrojas de Webb le permiten ver hacia atrás en el tiempo hasta el Big Bang, hace 13.800 millones de años.
Asimismo, el primer objetivo observado fue la nebulosa Carina, situada a unos 7.600 años luz. El telescopio espacial Hubble ya la había fotografiado y reveló gigantescas columnas de polvo y gas, uno de ellas la famosa Montaña Mística. Las imágenes del James Webb, cuyo espejo principal utilizado para captar la luz es mucho más grande, ofrecen una nueva perspectiva de Carina.
La Nebulosa del Anillo del Sur es otro de los objetivos. Se trata de una enorme nube de gas que rodea a una estrella moribunda y se encuentra a unos 2.000 años luz de la Tierra (un año luz equivale a más de 9.400 millones de kilómetros).
El tercer objetivo que se ha observado es "el Quinteto de Stephan", el primer grupo compacto de galaxias descubierto en 1787 que se encuentra en la constelación de Pegaso.
Aunque, probablemente, lo más tentador del "Webb" es la utilización de un cúmulo de galaxias, conocido como SMACS 0723, como una especie de lupa cósmica para ver otras galaxias distantes y débiles situadas detrás de esta.
Esta es la cara que puso el administrador de la NASA, Bill Nelson, cuando vio la primera imagen del telescopio espacial James Webb. Crédito: NASAMás allá de las imágenes, el martes próximo también se publicará la primera espectroscopia hecha por el Webb, un mecanismo que sirve para determinar la composición química de un objeto lejano.
Esta técnica se ha aplicado al WASP-96 b, un planeta gigante compuesto principalmente por gas. Se descubrió en 2014 y está situado fuera de nuestro sistema solar, a 1.150 años luz. Su masa es aproximadamente la mitad de la de Júpiter y gira alrededor de su estrella en sólo 3,4 días.
El telescopio espacial acaba de entrar en pleno funcionamiento, después de que el cohete Ariane 5 lo lanzara al espacio en diciembre pasado El Webb llegó a su puesto de observación tras un largo viaje, a 1,5 millones de kilómetros de la Tierra.