La Cancillería confirmó que hay cuatro argentinos en Kabul, en Afganistán, un país que volvió a estar comandado por los talibanes, tras el colapso del gobierno y la huida al extranjero del presidente Ashraf Ghani, quien admitió que “los talibanes ganaron”.
Todavía no hay reportes en otras ciudades afganas, adonde reina el caos por la vuelta al poder del movimiento islamista radical, después de 20 años.
De acuerdo a lo que informaron fuentes del Ministerio de Relaciones Exteriores, liderado por Felipe Solá, estas cuatro personas se encuentran bien y todas están en contacto con la embajada en Pakistán, que administra los asuntos en Afganistán.
Dentro del grupo de argentinos se halla Gilberto Velázquez Franco, quien es miembro de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que sale mañana rumbo a Kazajistán.
Tenés que leerLos talibanes rodearon Kabul y exigieron una transferencia del poderAdemás, dos miembros de una ONG, Melisa Rolls y Rodolfo Yamila, tienen pasaje comercial para mañana a Estambul. Tras una jornada caótica en el aeropuerto de Kabul -desde donde miles de afganos intentaron escapar hacia otras naciones-, en la Cancillería señalaron que, por ahora, el vuelo para estos dos argentinos permanece vigente.
El último de los nacidos en el país que está en Kabul es Andrés Arévalo, que se desempeña como piloto y también pertenece a una ONG. El hombre -casado con una mujer brasileña y padre de dos hijos brasileños- saldría de Afganistán hoy, rumbo a Uzbekistán, junto a otros pilotos, en un avión privado.
El Talibán tomó Kabul ayer, después que el presidente Ghani huyó del país, para marcar el fin de una costosa campaña de dos décadas en que Estados Unidos y sus aliados intentaron transformar Afganistán. Las fuerzas de seguridad entrenadas por Occidente se desplomaron en cuestión de días, incluso antes de la retirada de los últimos soldados norteamericanos.
Muchos residentes temen el caos y un regreso al tipo de gobierno brutal que impusieron los talibanes cuando estuvieron al mando del país por última vez, pese a que el grupo se comprometió a mantener el Estado de derecho durante la transición.