El Departamento Militar de Texas (Estados Unidos) ordenó a la Guardia Nacional el despliegue de diez vehículos blindados de transporte en la frontera entre el estado y México con el fin de impedir el paso de migrantes.
El estado busca aumentar los controles y la seguridad para evitar el cruce ilegal de inmigrantes. Estarán ubicados en varias posiciones y alrededor de 50 soldados serán capacitados para operarlos.
El Departamento Militar de Texas (Estados Unidos) ordenó a la Guardia Nacional el despliegue de diez vehículos blindados de transporte en la frontera entre el estado y México con el fin de impedir el paso de migrantes.
La orden al cuartel general que supervisa la operación Lone Star (Estrella Solitaria, en español) fue lanzada para contrarrestar la inmigración ilegal y el tráfico de drogas desde el país latinoamericano hacia territorio estadounidense.
La medida fue tomada días después de que el gobernador texano, el republicano Greg Abbott, anunciara que había invocado las cláusulas de invasión previstas por la Constitución de los Estados Unidos y de Texas por el elevado número de llegadas de indocumentados a la zona fronteriza.
Según un documento de planificación obtenido por medios locales, unos 50 soldados iban a ser entrenados para operar los vehículos blindados, mientras que funcionarios estatales identificarán diez posiciones para estacionarlos a lo largo de la frontera.
Asimismo, el Departamento Militar de Texas declaró que además de las diez tanquetas, la Guardia Nacional está aumentando el número de "vuelos de aviones e intensificando los esfuerzos de seguridad" en la zona.
"Estas acciones son parte de una estrategia más amplia para utilizar todas las herramientas disponibles tendientes a luchar contra el nivel récord de la inmigración ilegal. La Guardia Nacional de Texas está tomando medidas sin precedentes para salvaguardar nuestra frontera y para repeler y rechazar a los inmigrantes que intentan cruzar la frontera ilegalmente", explicaron desde el departamento.
Abbott lanzó la Operación Estrella Solitaria en marzo de 2021, enviando a miles de soldados y policías a la frontera sur, al tiempo que acusaba a la Administración de Joe Biden de no velar por la seguridad fronteriza en la región.
"Para [Abbott] es fácil decir que hay una invasión y enviar tropas a la frontera, con la consecuencia potencial de una situación importante de violaciones de derechos humanos", criticó Fernando García, director ejecutivo y fundador de la Red Fronteriza para los Derechos Humanos.
Agregó -citado por el sitio Actualidad RT- que el gobernador republicano "intenta justificar la narrativa de la invasión" al presentar como criminales violentos a los solicitantes de asilo y migrantes que buscan oportunidades en el país norteamericano.