El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, advirtió este jueves al Congreso de Estados Unidos que perderá la guerra contra la invasión rusa si Washington corta la ayuda de miles de millones de dólares a su país.
El gobierno de Polonia, en tanto, aclaró este jueves que cumplirá los acuerdos de suministro de armas a Ucrania y aseguró que las declaraciones del primer ministro polaco sobre un posible cese de esos envíos en medio de una reciente disputa por las exportaciones de cereales habían sido "malinterpretadas".
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, advirtió este jueves al Congreso de Estados Unidos que perderá la guerra contra la invasión rusa si Washington corta la ayuda de miles de millones de dólares a su país.
Zelenski llegó hoy a la capital estadounidense para buscar más armas para su contraofensiva frente a la invasión rusa, pese a las resistencias en el Capitolio a entregar más ayuda.
Se trata de su segunda visita a Washington desde que Rusia invadió Ucrania en febrero de 2022, y llega luego de que Zelenski diera esta semana su primer discurso presencial ante la Asamblea General de la ONU en Nueva York con su país en guerra.
Apenas arribado a Washington, el presidente, vestido con su habitual uniforme caqui, se dirigió al Congreso e inició una reunión con congresistas republicanos y demócratas para intentar convencerlos de que Estados Unidos siga gastando plata en ayudar a Ucrania.
Al salir, declaró a periodistas que había mantenido "un muy buen diálogo" con los congresistas.
Luego fue recibido en la Casa Blanca por el presidente demócrata Joe Biden y su esposa Jill, después de visitar el edificio del Pentágono, la sede del Departamento de Defensa, en su campaña por obtener más armamento, incluyendo misiles de mayor alcance.
"Llegamos a Washington", escribió en X (antes Twitter) Zelenski, que viajó acompañado de su esposa, la primera dama Olena Zelenski.
"En mis reuniones, la defensa aérea será una de las principales prioridades", añadió.
El mayor obstáculo a la ayuda está en el Congreso estadounidense, donde el presidente ucraniano deberá convencer a los líderes demócratas y republicanos y así evitar que un nuevo paquete de ayuda para Kiev se vea bloqueado por pugnas internas.
La Casa Blanca afirmó que la visita de Zelenski se produce en un "momento realmente crítico" para la lenta ofensiva lanzada por las tropas ucranianas en junio en zonas del este y sur de Ucrania ocupadas por Rusia.
En su discurso en la Asamblea General de la ONU en Nueva York, el martes pasado, aprovechó su tribuna para pedir que se mantenga el apoyo a su país frente al "genocidio".
Zelenski quiere que Estados Unidos continúe apoyando su lucha contra la invasión lanzada por Rusia, que llevó a Washington a entregarle a Ucrania más de 43.000 millones de dólares en asistencia.
"Estamos en la línea de meta", afirmó el mandatario en una entrevista con la cadena CNN el martes.
Este jueves, Ucrania sufrió bombardeos en varias ciudades que dejaron muertos y heridos, y que Zelenski denunció en el tuit en el que anunció su arribo a Washington.
Un asesor de la Presidencia ucraniana, Oleksiy Kuleba, advirtió que el país tiene por delante "meses difíciles" y que Rusia va a atacar instalaciones de infraestructura crítica y de energía, informó la agencia de noticias AFP.
Este viaje de Zelenski es muy diferente a su visita a Estados Unidos de diciembre de 2022, cuando acudió en secreto y fue recibido como un héroe.
Ahora, con las elecciones presidenciales estadounidenses de 2024, algunos representantes republicanos amenazan con bloquear un acuerdo presupuestario que impida la paralización del gobierno estadounidense, si se incluye una partida de ayuda para Ucrania, de unos 24.000 millones de dólares.
"¿Cuál es el plan para llegar a la victoria? Creo que eso es lo que quiere saber la opinión pública estadounidense", dijo esta semana el líder de la Cámara de Representantes, el republicano Kevin McCarthy.
Por su parte, Biden prometió mantener su apoyo a Ucrania y por eso recibirá a Zelenski y a su esposa en la Casa Blanca.
El presidente estadounidense quiere tener "una perspectiva del campo de batalla directamente del comandante en jefe de Ucrania", explicó John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional.
Biden pidió el martes a los líderes mundiales reunidos en la Asamblea General de la ONU que no abandonen a Ucrania.
"Rusia cree que el mundo se va a cansar y les van a dejar destruir Ucrania sin consecuencias", dijo el mandatario estadounidense, antes de advertir que, si se permite que "Ucrania sea desmembrada", otros países pueden sufrir la misma suerte.
El gobierno de Polonia, en tanto, aclaró este jueves que cumplirá los acuerdos de suministro de armas a Ucrania y aseguró que las declaraciones del primer ministro polaco sobre un posible cese de esos envíos en medio de una reciente disputa por las exportaciones de cereales habían sido "malinterpretadas".
Las declaraciones del primer ministro Mateusz Morawiecki "fueron interpretadas en el peor sentido posible", afirmó hoy el presidente polaco, Andrzej Duda, a la cadena TVN24.
"En mi opinión, el primer ministro quiso decir que no enviaremos a Ucrania el nuevo armamento que estamos comprando para modernizar al ejército polaco", añadió, según recogió la agencia de noticias AFP.
Duda hizo esa declaración un día después de que el premier Morawiecki anunciara que Polonia dejaba de enviar armamento a Ucrania.
Varsovia fue uno de los apoyos más firmes de Kiev desde que empezó la guerra con Rusia el 24 de febrero de 2022 y es uno de sus principales proveedores de armas.
Pero ayer, el Gobierno polaco afirmó que ya no suministrará más armamento a Ucrania y que se centrará en equipar a su propio ejército.
El vocero del Gobierno polaco, Piotr Muller, dijo esta mañana que "Polonia solo cumplirá con las entregas de munición y armamento previamente acordadas", según citas de la agencia de noticias PAP.
?Es alarmante ver cómo algunos de nuestros amigos en Europa juegan el papel de la solidaridad a nivel político, pero hacen un thriller con el tema de los granos?, se quejó el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ante la Asamblea General de la ONU
El mandatario ucraniano se refirió a países como Polonia, Eslovaquia y Hungría, que advirtieron que vetarán hasta fin de año el ingreso de cereales ucranianos, bloqueados de salir por el mar Negro debido a la invasión rusa, para proteger sus propios agricultores.
Además de sus propios envíos, Polonia también es un país de tránsito clave para el armamento que Estados Unidos y otros aliados occidentales remiten a Ucrania.
Por otra parte, Polonia acoge a cerca de un millón de refugiados ucranianos que se benefician de diversas clases de ayuda estatal.
Las tensiones entre Varsovia y Kiev se desataron a raíz de la prohibición polaca de importar granos ucranianos para proteger a sus propios agricultores.
El Ministerio ucraniano de Agricultura anunció hoy negociaciones con Polonia "en los próximos días" para resolver la disputa sobre las exportaciones de cereales.
La guerra entre Rusia y Ucrania provocó el bloqueo de las rutas comerciales por el mar Negro y convirtió a la Unión Europea (UE) en principal vía de tránsito y destino exportador de cereales ucranianos.
En mayo, la UE accedió a restringir las exportaciones a Bulgaria, Hungría, Polonia, Rumania y Eslovaquia para proteger a sus agricultores.
Sin embargo, el pasado viernes, la Comisión Europea anunció el cese de estas restricciones, alegando que "las distorsiones en los cinco países miembros vecinos de Ucrania han desaparecido".
Polonia, Hungría y Eslovaquia desafiaron la decisión e impusieron embargos unilaterales, a los que Kiev respondió anunciando un futuro recurso ante la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Un vocero del Ministerio de Agricultura eslovaco anunció hoy que su país acordó con Ucrania un mecanismo basado en licencias que remplazará en un futuro el embargo sobre los granos.
La cuestión de las exportaciones de granos es delicada en Polonia, con elecciones parlamentarias el próximo mes. El gobierno populista de derecha del partido Ley y Justicia goza de un fuerte apoyo en las zonas agrícolas.