Ucrania y la crítica a las organizaciones internacionales por la "ineficacia" en la guerra con Rusia
Analistas refuerzan la idea de un intenso apoyo de la OTAN y la Unión Europea, pero falta de acción directa contra Moscú. Moscú fue expulsada de X organizaciones.
Ucrania y la crítica a las organizaciones internacionales por la "ineficacia" en la guerra con Rusia
El conflicto entre Rusia y Ucrania atraviesa en las últimas semanas un cambio de paradigma. Desde Kiev se inició una contra ofensiva, esta vez efectiva, ante sus atacantes. A más de dos años del inicio de la invasión por el este, los ucranianos han atacado de forma directa a Moscú y varias locaciones rusas.
Esta situación no deja atrás ni oculta uno de los principales cuestionamientos de analistas políticos ucranianos y la gestión del presidente Volodimir Zelenski: la ineficacia de las organizaciones internacionales.
El apoyo a Ucrania por parte de espacios como la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y la Unión Europea (UE) no está en discusión. Las mil millonarias cifras otorgadas en armamento militar bastarían como ejemplo, que se complementan con un sinfín de bloqueos y sanciones.
Pero en el caso puntual de la ONU (Organización de las Naciones Unidas), el reclamo de Ucrania excede el mero aporte discursivo y avanza sobre una necesidad de exclusión directa de Rusia, algo que resulta casi imposible por la propia estructura de la organización.
Sobre esta problemática profundiza un informe de Derevianko destacado por Oleksandr Slyvchuk, analista político ucraniano y representante el Programa de cooperación para España y Latinoamérica del centro de pensamiento ucraniano Transatlantic Dialogue Center, en diálogo con El Litoral.
La ONU y el Consejo de Seguridad
Las Naciones Unidas han cumplido la encomiable labor de establecer criterios y formalizar posturas en contra de la invasión de Rusia, expulsandola incluso del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
Pero el mayor traspié se da dentro del Consejo de Seguridad, el espacio de mayor influencia para estos casos y donde los rusos poseen el derecho a veto a cualquier resolución.
“El hecho de que una importante herramienta de la organización, la Corte Internacional de Justicia, puede considerar un caso sólo con el consentimiento de ambas partes, pone en duda la eficacia de la ONU para detener la agresión rusa. Pero fue el Consejo de Seguridad el que se convirtió en el pináculo de la ineficacia de la ONU”, destaca de forma dura el informe de Derevianko.
El texto profundiza sobre la estrategia del gobierno de Vladimir Putin: ”Utiliza el derecho de veto para evitar la condena de sus acciones cuando la toma de decisiones en la Bielorrusia va en contra de sus intereses, y aún más cuando se trata de Ucrania. Sin embargo, existe un artículo que establece que los Estados que son parte en el conflicto deben abstenerse de votar sobre cuestiones controvertidas. Dado que no existe ningún mecanismo para hacer cumplir los requisitos del artículo, sólo se utilizó de forma voluntaria. Sólo algunos Estados se abstuvieron de votar sobre cuestiones en las que eran partes en el conflicto”.
Volodimir Zelenski, presidente de Ucrania, en la ONU durante abril de 2022. Crédito: Andrew Kelly/Reuters
“Las Naciones Unidas, como institución de seguridad internacional creada tras la Segunda Guerra Mundial, ha demostrado su ineficacia y ha reforzado el hecho de su incapacidad para regular y prevenir los conflictos armados, especialmente cuando está implicado un miembro permanente del Consejo de Seguridad. La ONU, actuando dentro de sus capacidades y con ciertos logros en el ámbito humanitario, sigue siendo una importante plataforma política para la interacción de Estados de distinta fuerza, lo que fundamenta la apelación a las normas del derecho internacional en el proceso de resolución de conflictos interestatales”,
Vasily Nebenzya, representante permanente de Rusia ante las Naciones Unidas, habla durante una reunión del Consejo de Seguridad, el 23 de febrero de 2023, en la sede de la ONU. Crédito: Andrew Kelly/Reuters
Volodymyr Ohryzko, ex ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, indicó que también existe un limitante a la hora de reformar la ONU con el objetivo de quitarle el poder de veto: “Es imposible reformar el Consejo de Seguridad de la ONU, porque Rusia también puede vetar el mismo intento de reforma”.
Controversias dentro de la Unión Europea y la OTAN
La principal “excusa” que tomó Rusia para su ataque a Ucrania fue el eventual riesgo de su ingreso a la OTAN, que extendería el tamaño de la organización hasta sus fronteras. El caso ucraniano se posiciona por encima del resto de Europa del Este por el trasfondo histórico de la región.
La relevancia de la OTAN en el conflicto bélico la pone en el foco de responsabilidad, según la perspectiva ucraniana.
“La visión norteamericana de la OTAN, que implica actuaciones a escala mundial, no es compartida por muchos aliados europeos. Para la mayoría de los aliados europeos, incluyendo incluso a aquellos como Gran Bretaña y Francia, cuyos intereses se extienden mucho más allá de las fronteras de Europa, la Alianza del Atlántico Norte sigue siendo una organización de seguridad típicamente europea, cuyo principal objetivo es garantizar la seguridad en la propia Europa”, se cuestiona en el informe de Derevianko.
El documento extiende: “Dada la diferencia de puntos de vista, parece poco probable que en las condiciones de la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania, los aliados acepten ampliar territorialmente la influencia de la OTAN. Si el objetivo de la OTAN es exclusivamente garantizar la defensa colectiva de sus miembros, esto convierte prácticamente a la organización en una herramienta ineficaz para contrarrestar los principales desafíos y amenazas a la seguridad internacional. Y aquí es cuando la agresión armada de Rusia contra Ucrania, que comparte fronteras con países miembros de la OTAN, se convirtió en una especie de renacimiento de la política de poder”.
Lo cierto es que la avanzada rusa ha generado una reacción en el seno de Europa, con Emmanuel Macron, presidente de Francia, al frente de la cruzada. Uno de los cercanos al territorio ruso y afectado por su historial, Polonia, ha incrementado su presupuesto de defensa y apunta a poseer el más alto de la Unión Europea a finales de década.
Emmanuel Macron, presidente de Francia. Crédito: Xinhua/Sun Fei
Si se habla de la UE, allí se ha gestado una discusión respecto a las responsabilidades que el grupo económico debería tomar en la guerra
Algunos miembros que conforman la UE han sido acusados de prorrusos. El caso más emblemático es el de Viktor Orban, el conservador primer ministro húngaro que recientemente ha realizado una “gira de paz” incluyendo visita al propio Putin.
Viktor Orban, primer ministro de Hungría, junto Vladimir Putin el 5 de julio de 2024 en Moscú. Crédito Evgenia Novozhenina/Reuters
Al respecto, el documento de Derevianko refuerza: “Hungría, y más tarde Eslovaquia, en los primeros días de la guerra siguieron demostrando lealtad a la Federación Rusa, bloqueando no sólo los programas de sanciones de los distintos Estados, sino también la prestación de ayuda financiera a Ucrania. La política de Austria, que junto con Hungría acordó no suministrar armas a Ucrania, supone una importante amenaza para la unidad europea”
“Para la Unión Europea, como baluarte de los valores democráticos, el curso ulterior de los acontecimientos en Ucrania y la evolución de las decisiones políticas de la UE respecto al agresor serán en gran medida decisivos para su futuro”, profundiza el análisis ucraniano.
Lista completa de organizaciones que sí excluyeron a Rusia
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE)
Consejo Euroártico de Barents
Comisión del Danubio
Consejo de Coordinación del Grupo de Países Desarrollados de la OMC
Unión Internacional de Ferrocarriles
Consejo Internacional de Archivos
Consejo de Estados del Mar Báltico
Consejo de Europa
Organización Internacional del Trabajo
Organización Europea para la Investigación Nuclear