El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró que su país no necesita licencias especiales de los Estados Unidos para producir y que la restauración de las sanciones de Washington no impedirá el crecimiento de la economía nacional.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró que su país no necesita licencias especiales de los Estados Unidos para producir y que la restauración de las sanciones de Washington no impedirá el crecimiento de la economía nacional.
Maduro formuló las declaraciones en respuesta a la decisión de la Administración de Joe Biden de reimponer sanciones contra la actividad gasífera y petrolera de su país, mismas que pretenden condicionar fuertemente los negocios energéticos de Venezuela.
"No hay sanción, no hay amenaza que hoy por hoy le haga daño al esfuerzo de construir un modelo económico productivo, solo dependemos de nuestro trabajo y la unión que tenemos", advirtió el mandatario.
El jefe de la delegación de diálogo del Gobierno venezolano, Jorge Rodríguez, enfatizó que la decisión de Estados Unidos de restaurar sanciones al petróleo forma parte de las presiones y aseguró que, pese a la medida, se mantendrá el proceso de elecciones presidenciales en su país.
A ojos del líder chavista, "las sanciones de Washington, al contrario de lo que pretenden, dan más impulso" a la nación sudamericana. "No necesitamos licencia para crecer, producir o trabajar", agregó. Asimismo, subrayó que Venezuela "camina con pies propios".
Por otro lado, el ministro de Petróleo venezolano, Rafael Tellechea, informó que firmó, junto a representantes de la multinacional española Repsol, un acuerdo para extender el área geográfica de la empresa mixta Petroquiriquire, lo cual supone una profundización en los nexos entre ambas empresas.
La energética estatal Petrobras se topó con una creciente resistencia de grupos indígenas y agencias gubernamentales a su principal proyecto de exploración petrolífera, que abriría la parte más prometedora de la costa norte de Brasil a la extracción de petróleo.
En dicho contexto, la agencia ambiental Ibama denegó a la empresa petrolera una licencia para realizar perforaciones exploratorias en alta mar en el área de Foz do Amazonas el año pasado, citando posibles impactos en los grupos indígenas y el sensible bioma costero.
Pero un llamado de Petrobras para que Ibama revoque su decisión obtuvo un poderoso respaldo político, con el respaldo del presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Visitas a cuatro aldeas indígenas, entrevistas con más de una docena de líderes locales y documentos no divulgados anteriormente muestran una creciente oposición organizada al intento de Petrobras de revertir la suspensión de las perforaciones exploratorias.
En julio de 2022, el Consejo de Caciques del Pueblo Indígena de Oiapoque, un grupo que representa a más de 60 pueblos indígenas de la zona, pidió a los fiscales federales que se involucraran, denunciando una presunta violación de sus derechos.
Los fiscales brasileños tienen el mandato de proteger a los pueblos indígenas, y a menudo se ponen de su lado en disputas con empresas o gobiernos federales y estatales.