La mañana del sábado 7 de octubre cambió para siempre la vida de Israel. Alrededor de las 6.30, un ataque terrorista coordinado por Hamas asesinó a civiles, sin importar edad ni sexo. Fueron horas de extrema crueldad, sobre todo por las imágenes que se vieron luego y por los relatos de quienes sobrevivieron.
Es el caso de Inés Grimland, que fue repatriada en los vuelos que puso a disposición la Cancillería Argentina y que gentilmente dialogó con El Litoral.
Minutos dramáticos
“Yo llegué a Israel el 18 de septiembre para recibir a mi bisnieto, que nació el 27 de ese mes. Mi nieto y su familia viven en el kibutz de Nirim, situado cerca de la Franja de Gaza”, arrancó la mujer.
Y agregó: “Fue uno de los primeros kibutz en ser atacados. Estábamos en la casa y a las 6.30 empezaron a sonar las sirenas y en un principio pensamos que era algo ‘normal’ que sucede allí, que a cada rato suenan y hay que meterse en los refugios. Nos dimos cuenta que algo diferente había”.
El relato de la entrevistada continuó con más detalles de ese dramático momento: “Además de las bombas se habían infiltrado terroristas en el kibutz. Entraron por la zona donde vive mi nieto y empezaron a incendiar casas y autos para que la gente saliera y los que lo hacían los mataban”.
“Mi nieto y su familia se encerraron en una habitación de seguridad y por medio de una cámara de monitoreo de bebé, vieron como entraron los terroristas a su casa. Intentaron irrumpir en la habitación de seguridad pero, por suerte, no lo lograron”, continuó Grimland.
En su dramático repaso, la mujer no se guardó ningún detalle. “Y empezaron a incendiar la casa. Mi nieto, su mujer, el bebé y un perro estuvieron encerrados en la habitación entre seis y ocho horas. Lleno de humo, apenas podían respirar por una pequeña endijas que había. Resistieron porque sabían que no podían salir porque era una muerte segura”, contó.
La entrevistada regresó a la Argentina en un vuelo coordinado por Cancillería.
A salvo
En otro tramo del contacto con CYD Litoral vía videollamada, la sobreviviente señaló cómo se salvaron. “Por suerte llegó el ejército y los llevó rápidamente a un hospital en Beerseba, donde estuvieron internados dos o tres días con oxígeno por todo el humo que tragaron. Por suerte ellos están bien, vivos, y los llevaron a una zona segura”, dijo.
En ese sentido, la mujer sumó: “Nosotros también nos metimos en una habitación de seguridad. Nos tiramos al piso y no podíamos salir, ni siquiera asomarnos. Era peligroso. Había terroristas por toda la zona. Yo estaba con mi hija y el resto de mi familia”.
Los misiles que fueron lanzados desde Gaza. Crédito: Reuters.
Inaudito
Sobre el final del reportaje, Grimland dejó sus sensaciones sobre lo que está ocurriendo. “Nunca pasó algo como lo que sucedió ahora. Es inédito. Nos vinieron a buscar del ejército y nos llevaron a un refugio general. Al día siguiente nos evacuaron del kibutz”, aseguró.
Y agregó: “La tranquilidad no vuelve nunca. Llegué a casa ayer (martes) por la tarde, con el segundo vuelo de repatriación. Tengo una hija en Israel y la otra en Argentina. Trato de colaborar en todo lo que puedo”.
Para finalizar la entrevista, la argentina sobreviviente al ataque terrorista de Hamás en Israel, manifestó: “Mi bisnieto nació por segunda vez en pocos días. Estuvo encerrado ocho horas en una habitación que se construye para protegerse de los bombardeos, inahalando humo hasta que lo pudieron sacar. El resto de mi familia volvió a nacer”.
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