Un grupo de turistas vivió un momento de desesperación en Rusia, luego de que una hamaca ubicada a 1.800 metros de altura se desprendiera de su eje y dos mujeres cayeran por un acantilado.
Las turistas salvaron su vida. Las autoridades admitieron que la atracción “no cumplía las normas de seguridad correspondientes”.
Un grupo de turistas vivió un momento de desesperación en Rusia, luego de que una hamaca ubicada a 1.800 metros de altura se desprendiera de su eje y dos mujeres cayeran por un acantilado.
Ocurrió en el Cañón de Sulak, una atracción turística muy famosa en la zona. La actividad consiste en hamacarse en una silla doble de madera, al borde del cañón y fotografiarse durante el proceso.
En un video que circuló por redes sociales, dos mujeres están balanceándose en la hamaca mientras el resto de los visitantes aplaude y celebra el momento, hasta que una de las cadenas de la estructura se venció y ambas jóvenes cayeron presuntamente hacia el vacío. El resto de los presentes comenzó a gritar de desesperación y a pedir auxilio.
Por fortuna, ambas mujeres aterrizaron en una plataforma de madera, ubicada a unos metros por debajo de la hamaca.
Según informó Lad Bible, las jóvenes sufrieron heridas menores, cortes y hematomas. “Las chicas se asustaron y sufrieron arañazos, pero ninguna de ellas sufrió heridas graves”, declaró uno de los presentes a Komsomolskaya Pravda.
La Policía local anunció que realizará una investigación alrededor del columpio, que deberá ser sometido a inspecciones. “No cumplía las normas de seguridad correspondientes”, reconoció el ministerio de Turismo de Daguestán.
“Es aterrador pensar qué hubiera ocurrido si se hubiera soltado la hamaca cuando estaban a la altura máxima”, dijo una mujer que fue testigo de los hechos al Komsomolskaya Pravda.