La capital uruguaya amaneció con tormentas que convirtieron calles y avenidas en ríos.
Calles como ríos. Autos con el agua hasta el techo. Así amaneció Montevideo este lunes, afectada por un temporal de lluvias que sembró una situación "sin precedentes".
Según informó el diario El País, las intensas lluvias afectaron a todo el país y generaron varias inundaciones en Montevideo y Canelones, y afectaron miles de personas sin electricidad.
Siempre según El País, el pronostico indicaba que las fuertes e intensas lluvias seguirían hasta por lo menos el mediodía.
El Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet) informó que se registraron entre 50 y 100 mm en Montevideo y entre 50 y 120 mm en Canelones "siendo más intensas las lluvias entre las 05:00 y 07:00 horas".
Unas 19 mil personas no tenían tenían luz. Y La Administración Nacional de Usinas y Trasmisiones Eléctricas (UTE), empresa pública del Sector Energía, no podía anticipar este lunes cuando volvería el suministro.
"Sin precedentes"
La intendencia de Montevideo calificó la situación "sin precedentes".
En la capital, Malvín fue uno de los barrios más afectados con calles cortadas por las fuertes lluvias. Concepción del Uruguay fue una de la principales arterias afectadas. Punta Gorda y Punta de Rieles/ Bella Italia acumulan unos 1.500 usuarios sin suministro eléctrico, respectivamente. Otras zonas afectadas son Ituzaingó, Carrasco y Buceo. En Montevideo, son unos 10.300 los servicios afectados, detalló la prensa local.
"Debido a las intensas lluvias que se registraron en las últimas horas se detectaron inundaciones en distintas zonas de la ciudad", informó la Intendencia de Montevideo (IMM) en redes sociales. Trabajan cuadrillas desde la madrugada, así como se han puesto "a disposición todos sus recursos para atender un tema sin precedentes", agregó la comuna capitalina.
Por otro lado, en Canelones, también se registraron varias calles inundadas y hay más de 2.900 hogares sin energía eléctrica.
El país vecino viene de sufrir una ola de calor como la de Buenos Aires y estaba pronosticado que tras el fin de las temperaturas sofocantes vendrían días de lluvias, incluso por todo lo que queda de enero.
Todo el país se encuentra bajo una alerta amarilla por tormentas fuertes.