Más de 500 mil personas continuaban sin suministro eléctrico en la ciudad canadiense de Quebec, dos días después de que una fuerte nevada afectara el este de Canadá y dejara dos muertos y grandes daños materiales, particularmente en Montreal.
Más de 500 mil personas continuaban sin suministro eléctrico en la ciudad canadiense de Quebec, dos días después de que una fuerte nevada afectara el este de Canadá y dejara dos muertos y grandes daños materiales, particularmente en Montreal.
"Hemos restablecido la energía a poco más de un tercio de las personas afectadas por los apagones causados por la tormenta de hielo", dijo el proveedor de electricidad Hydro-Québec.
Según informaron fuentes energéticas, más 500.000 hogares seguían sin suministro eléctrico.
"Hydro-Québec solucionó cerca de 50% de las situaciones y tenemos como meta que esta noche alrededor de 80% de las residencias vuelvan a estar conectadas y de aquí a mañana por la noche el 95%", informó a su vez a la prensa el primer ministro de Quebec, François Legault.
En tanto, el ministro de Economía y Energía de Quebec, Pierre Fitzgibbon afirmó: "Estamos muy satisfechos con la gestión de la crisis por parte de Hydro-Québec".
En relación al restablecimiento del suministro eléctrico, Régis Tellier, portavoz de Hydro-Québec, indicó: "Sabemos que para algunos clientes durará hasta el domingo, o posiblemente el lunes".
A su vez, el vocero detalló que las condiciones meteorológicas más favorables que se esperan a lo largo del día deberían "acelerar el restablecimiento del servicio".
Se trata del mayor corte en la red eléctrica de Quebec desde la tormenta de hielo de 1998, que generó graves dificultades durante varias semanas a provincia.
La ciudad de Montreal, que registró cerca de la mitad de los casos de interrupción del servicio, abrió seis centros de alojamiento temporal de emergencia para los residentes sin electricidad.
En tanto, cientos de trabajadores municipales continúan con sus tareas, en especial en parques cubiertos de ramas de árboles que se desplomaron bajo el peso del hielo, mientras se mantienen intensas ráfagas de viento.
Las autoridades registraron dos muertes, uno de ellos un residente del este de Ontario aplastado por un árbol el miércoles y un hombre de 60 años golpeado por una rama mientras intentaba limpiar su jardín, el jueves en Quebec.
Además se informó que se produjeron alrededor de 60 intoxicaciones con monóxido de carbono, debidas en algunos casos, a la utilización de elementos inadecuados para calefaccionar las viviendas.
Con el fin de despejar las áreas afectadas por la tormenta, trabajadores municipales trabajan en el terreno dañado, aunque las ráfagas de viento que aún persisten amenazan con agravar el problema.
En tanto, Rosalie Gouba, una vecina afectada por los problemas en el suministro de energía, lamentó haber tenido que tirar parte de las reservas de alimentos que tenía para los próximos meses por la falta de electricidad.
"La primera noche fue muy difícil porque tengo miedo de dormir en completa oscuridad. Como estoy estresada, los niños también lo están", dijo.