Las imágenes recorren el mundo. “Lo que llueve en un año, llovió en poco tiempo”, es una de las frases que se repite. Valencia y su área metropolitana atraviesa una crisis poco vista en los últimos tiempos a raíz del fenómeno climático conocido como DANA. 211 fallecidos es la cifra oficial a este martes pero los operativos de rescate continúan.
En medio del caos, El Litoral se comunicó con una santafesina que está radicada en esa región española desde hace un poco más de un año. “Antes que nada quiero aclarar que la lluvia se registraba desde antes del fatídico martes”, comienza diciendo Alicia Sosa.
En la continuidad de su relato, la oriunda de la ciudad de Santa Fe comentó que la última vez que Valencia sufrió una DANA fue en 1957. “Desde ese momento se decidió reencauzar el río Turia bordeando la ciudad, dejando a pueblos del sur por fuera. Este río generalmente está seco, con apenas un hilo de agua”, señaló. Entonces, la seguidilla de precipitaciones y la intensidad del martes inundó este cauce.
— ¿Es cierto que demoraron las alertas y por ello mucha gente quedó atrapada?
— No es que fue de un momento para otro sino que ya había lluvias, o sea, el Estado podría haber emitido en su momento alarmas antes porque ya se sabía lo que podía pasar, cosa que no sucedió. Es cierto, demoraron las alarmas y por eso mucha gente quedó atrapada.
Todo esto sucedió en los pueblos más cercanos. Yo quedé a unos 3 km y medio de la localidad más cercana, que es La Torre, que sufrió en carne propia. Estas comunas fueron inundadas más o menos a las 18:30 y las alarmas sonaron a las 20:30. Me parece que dos horas y media después de que la gente estaba tapada de agua es un poquito tarde.
La localidad de Paiporta, una de las más golpeadas por la DANA. Crédito: Reuters.
A esa hora, al igual que en Argentina, los chicos salen de la escuela y lo propio hacía la gente de sus trabajos, aquí se acostumbra a realizar horario corrido. Entonces, la situación agarró a mucha gente en el medio del camino. Se podría haber evitado si se transmitía la alarma.
A las 17 había salido el Jefe del Ayuntamiento de acá de Valencia diciendo que ‘el mal tiempo ya había pasado’, cuando a las 18:30 la gente se encontró con esto. Fue arrasado totalmente todo, los autos, los puentes y fue terrible. Se podría haber evitado mucho de todo esto.
— El agua no bajó hasta mucho después porque seguía lloviendo, se empezó a tapar todo y la ciudad no está preparada. Lo que sí los grupos de ayuda se organizaron automáticamente. Estoy un grupo de argentinos acá en Valencia y de ahí salieron voluntarios; gente, que al otro día ya estaba yendo a limpiar, a ayudar en lo que sea posible.
El Estado está totalmente ausente. Hasta hoy, seis días después, no se ha decretado una alarma y recién está llegando de Galicia un cuerpo de militares por mar, con ayuda concreta. Acá se movilizó la gente sola, que salió con lo que teníamos en casa, con palas a juntar la basura, con escurridores, con lo que tenías a mano. Y siguen yendo.
Hay clases suspendidas en todos los niveles y los universitarios están todos yendo a ayudar con lo que tienen. Acá está muy enarbolada la idea de ‘el pueblo salva al pueblo’, porque son los únicos que se movieron y se están moviendo hasta ahora.
—¿Cómo se encuentra Valencia en estos momentos?
— Sé que muchos argentinos han perdido todo; negocios, sus casas. Otros han quedado aislados y demás. También conozco gente que ha quedado incomunicada porque es imposible ingresar a sus domicilios por el barro y todavía hay autos que no se han sido retirados de las entradas de los garajes.
Valencia en este momento está patas para arriba. Es un caos. No hay mandatarios que estén a la orden; directamente no hay orden de ningún tipo. Hay miles y miles de voluntarios, el domingo y el sábado fue impresionante y el viernes también porque fue feriado.
Tapados de barro. Las imágenes que recorren el mundo muestran una ciudad "pausada" tras la DANA. Crédito: Reuters.
Un montón de gente, de particulares, de civiles, que fuimos a dar una mano. Es un silencio total en la ciudad entera. No se entendía la magnitud que había. Yo que estoy más alejada de todo esto en el momento en el que veía las cosas pensaba que era algo más superficial, que era algo que obviamente afectaba, pero que no iba a ser tanto como es y realmente lo que está pasando es monstruoso.
La gente en la calle no hace otra cosa más que hablar de esto. Andan llenos de barro, que van a ayudar con sus baldes y escobas. Habla del gran pueblo que hay, gente de afuera, de acá e inmigrantes.
Y así está en estado de emergencia total. Todavía tenemos la mala dicha de tener los políticos que tenemos, la clase política a nivel mundial que se fijan en pelear entre ellos en lugar de ponerse las pilas y ayudar en lo que haya que ayudar.
Como por ejemplo, dar la orden que hay que dar para que salgan los cuerpos totalmente capacitados que tienen, como los servicios de bomberos o los militares que están esperando a la orden desde el día cero que no se da. Lamentablemente, acá lo único que se puede decir es que el pueblo salva al pueblo.
El trabajo de voluntarios se desplegó desde los primeros minutos. Crédito: Reuters.
Marcha
Sosa anticipó que el sábado 9 de noviembre se realizará una marcha a las 18.30 hora local (14.30 de Argentina) que recorrerá las calles de Valencia, con punto de inicio en la plaza del Ayuntamiento de Valencia y finalización en el Palau de la Generalitat. La protesta se origina en lo que contó la santafesina, la poca acción del gobierno ante la crisis.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.