Desde que asumió la presidencia pro tempore del Consejo Europeo de la Unión Europea (UE) el pasado 1 de julio, Viktor Orban, primer ministro de Hungría, ya realizó viajes a Ucrania, Rusia, China e iniciaría encuentros en Estados Unidos.
El primer ministro de Hungría asumió como presidente pro tempore del Consejo Europeo. Visitó Kiev, Rusia, China y viaja a Estados Unidos.
Desde que asumió la presidencia pro tempore del Consejo Europeo de la Unión Europea (UE) el pasado 1 de julio, Viktor Orban, primer ministro de Hungría, ya realizó viajes a Ucrania, Rusia, China e iniciaría encuentros en Estados Unidos.
Las reuniones directas con los mandatarios de respectivos países, a excepción de Joe Biden ya que no se presentó su agenda oficial, posicionan a Orban como la única figura que se ha sentado de manera formal a dialogar con ambas partes desde la invasión del 24 de febrero de 2022.
El líder húngaro no cuenta con el apoyo de la UE, que desde Bruselas criticó su encuentro con Vladimir Putin, pero su presencia como primer ministro desde 2010 y la réplica de recorridos que podrían emular los de Donald Trump (salvando las distancias), lo muestran como una figura polìtica capaz de sentar las bases de un acuerdo.
Su intención de ampliar su ala de influencia tuvo uno de los ejemplos más claros en Argentina, cuando se convirtió en el invitado más “exótico” de la asunción de Javier Milei.
El 2 de julio estuvo presente en Kiev junto al presidente ucraniano, Volodimir Zelensky. Allí, le planteó la posibilidad de acelerar un eventual proceso de paz planteando una fecha límite y posicionando primero el alto el fuego.
"Le pedí al presidente que pensara si podíamos revertir el orden y acelerar las conversaciones de paz estableciendo primero un alto el fuego. Un alto el fuego vinculado a una fecha límite daría la oportunidad de acelerar las conversaciones de paz. Exploré esta posibilidad con el presidente y estoy agradecido por sus respuestas honestas y su negociación", expresó Orban.
La relación entre ambos se mantiene tensa desde que Hungría se abstuvo en reiteradas ocasiones a la expansión de los paquetes de ayuda europeos para la guerra, situación que provocó una discusión entre ambos en pleno Congreso de la Nación Argentina.
Horas antes del encuentro, Zelensky había pedido a Hungría "eficacia en la promoción de nuestros valores, objetivos e intereses europeos compartidos".
El reclamo de antaño desde Budapest recae en ciertas represiones sociales a la importante comunidad húngara presente en Ucrania.
El 5 de julio Orban visitó Moscú para encontrarse con el ya veterano presidente Vladimir Putin, anunciándose como representante de la Unión, pero sin el aval de esta.
Orban ha sido acusado de forma sistemática de ser un “aliado” del Kremlin en Europa, coincidiendo en varias políticas sociales, nacionalistas y de género, además de los guiños en el Parlamento Europeo.
Aquí es donde el portavoz del Gobierno húngaro, Bertalan Havasi, definió la gira concretamente como una “misión de paz”.
“Espero que tengamos la oportunidad de intercambiar opiniones sobre las relaciones bilaterales en esta difícil situación. Y, por supuesto, hablemos de las perspectivas de desarrollo de la mayor crisis europea, me refiero a Ucrania”, indicó Putin en la apertura oficial del encuentro.
Cabe recordar que la vigente propuesta rusa para un alto el fuego solicita la anexión de cuatro regiones ucranianas, la retirada de las tropas de Kiev del este y el sur del país, y la renuncia de Ucrania a los planes de ingreso en la OTAN.
Este lunes, a 48 horas de la reunión “de paz”, Rusia lanzó 40 misiles a la ciudad de Kiev y provocó al menos siete muertos.
La de este lunes a primera hora en Beijing junto a Xi Jiping fue sorpresiva y no había sido anunciada.
El propio Orban en sus redes sociales definió al presidente chino y su nación como “una potencia clave para crear las condiciones de paz", en relación al conflicto bélico en Eurasia.
Desde la agencia de noticias del gobierno de la República Popular China indicaron que “un pronto alto el fuego y un acuerdo político redundan en interés de todas las partes, afirmando que la prioridad es enfriar la situación respetando los tres principios de no expansión del campo de batalla, no escalada de los combates y no avivamiento de las llamas por ninguna de las partes".
Xi manifestó luego: "China ha estado promoviendo activamente las conversaciones de paz a su manera y alentando y apoyando todos los esfuerzos conducentes a una solución pacífica de la crisis".
Este martes se lleva a cabo en Washington la cumbre de la Organización del Tratado del Atlántico Norte y la celebración del 75º aniversario, donde Orban debería estar presente como uno de los 32 miembros.
Sus redes oficiales indicaron que su próximo destino es Washington, pero sin detallar su agenda o si estará con Biden, quien pende de un hilo en Estados Unidos.
“Más que celebrar, tomaremos decisiones decisivas”, adelantó Jens Stoltenberg, secretario general de la Alianza.
Se estima que se avance en la confección de un plan anual de 40.000 millones de dólares que se complementaría con ayuda militar internacional a Kiev y de las tareas de formación de soldados ucranianos.
Será, principalmente, el foco más cercano en el tiempo de las repercusiones de los polémicos encuentros del también polémico primer ministro húngaro.