La ONG Amnistía Internacional (AI) afirmó que varios manifestantes habían muerto y que intentaban "determinar la cifra exacta", pero las autoridades solo admitieron un deceso y 20 heridos.
Manifestantes que protestan contra la violencia policial se mantenían este miércoles en las calles de la ciudad nigeriana de Lagos, en desafío a un toque de queda y luego de una caótica noche de represión a tiros que causó una ola de condenas internacionales.
La ONG Amnistía Internacional (AI) afirmó que varios manifestantes habían muerto y que intentaban "determinar la cifra exacta", pero las autoridades solo admitieron un deceso y 20 heridos.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, llamó miércoles a poner fin a la "brutalidad" de la policía en Nigeria, donde una veintena de manifestantes han muerto desde que comenzaron las protestas, hace dos semanas.
"El secretario general insta a las fuerzas de seguridad a actuar en todo momento con la máxima moderación mientras pide a los manifestantes que protesten pacíficamente y depongan la violencia", dijo Stephane Dujarric, vocero de Guterres, en un comunicado.
El jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Josep Borrell, también condenó la represión y exigió que los responsables "sean llevados a la Justicia".
El candidato presidencial demócrata de Estados Unidos, Joe Biden, pidió el fin de la violencia.
"Urjo al presidente (nigeriano, Muhammadu) Buhari, y al Ejército nigeriano detener la violenta represión contra los manifestantes en Nigeria, que ya ha resultado en varias muertes", dijo Biden en un comunicado.
Ráfagas de disparos se escucharon anoche en varias partes de Lagos, la ciudad más grande de Nigeria, de 14 millones de habitantes, incluyendo en la autopista que va al aeropuerto, en una estación de colectivos y frente a un canal de televisión.
También se informó de manifestaciones y disparos en otras ciudades nigerianas, incluida la capital, Abuya.
Las protestas, convocadas bajo el lema #acabarconelSARS, en referencia al Escuadrón Especial Antirrobo (SARS), comenzaron después de que circulara un video que mostraba a un hombre siendo golpeado, aparentemente por uniformados de ese grupo.
Cuando estallaron las manifestaciones en varias ciudades del país, el Gobierno anunció que prohibiría el escuadrón antirrobo, al que durante varios años diversos grupos de derechos humanos han culpado de abusos generalizados, como torturas y asesinatos.
Sin embargo, los manifestantes no se conformaron y empezaron a exigir el fin de los abusos y el respeto de los derechos humanos por parte de todos los sectores de la fuerza policial.
No quedó claro quién efectuó los disparos de anoche contra los manifestantes, aunque AI acusó a las fuerzas de seguridad de por lo menos diez de las muertes ocurridas desde que estallaron las protestas.
También se culpó por la violencia a grupos armados supuestamente enviados por la policía para disolver las protestas.
El gobernador del estado de Lagos, Babajide Sanwo-Olu, informó que hubo un muerto y 20 heridos en los hechos de violencia de anoche, horas después de haber afirmado que no había habido fallecidos.
"Nos llegan informaciones del hospital de Reddington que confirman que una persona murió por un traumatismo en la cabeza", afirmó el gobernador y recalcó que se trata de un "caso aislado", informó la agencia de noticias AFP.
El gobernador explicó que se abrió una investigación sobre la actuación de "elementos del Ejército nigeriano" desplegados para contener las protestas.
Buhari casi no hizo comentarios sobre las protestas y la violencia que se extiende por todo el país.
El toque de queda en Lagos comenzó el martes, después de que un grupo de manifestantes incendiara una comisaría de la ciudad y la policía matara a tiros a dos personas.
Con información de Télam