Después de que Meta permitiera publicar en sus redes sociales, Facebook e Instagram, llamadas a la violencia contra los ciudadanos rusos, el Gobierno del país eslavo anunció que esta red social será bloqueada en Rusia a partir del 14 de marzo.
Después de que Meta permitiera publicar en sus redes sociales, Facebook e Instagram, llamadas a la violencia contra los ciudadanos rusos, el Gobierno del país eslavo anunció que esta red social será bloqueada en Rusia a partir del 14 de marzo.
"Esta decisión cortará la conexión de 80 millones de rusos y del resto del mundo, pues un 80% de los ciudadanos rusos siguen una cuenta de Instagram fuera de su país. Esto está mal", dijo Adam Mosseri, el jefe de Instagram,
Pero, ¿dónde estaban estas afirmaciones cuando miles de creadores de contenido rusos perdieron la oportunidad de seguir monetizando en YouTube y en esencia perdieron su trabajo? Cabe señalar, que con esto el 100% de la población rusa ha perdido la oportunidad de informarse, aprender y entretenerse con el contenido de estos creadores.
¿Dónde estaba Mosseri cuando el 100% de la población rusa de un día al otro perdió la oportunidad de viajar, realizar compras en el extranjero o enviar remesas a sus familiares en otros países, cuando el sistema bancario ruso fue desconectado del sistema SWIFT y de los sistemas de pagos de MasterCard y Visa?
Cabe señalar que decenas de miles, e incluso cientos de miles, de ciudadanos rusos por todo el mundo, que dependían de estos sistemas, se quedaron varados en otros países.
Tampoco le pareció mal que el 100% de los artesanos rusos que dependían de plataformas como Etsy se quedaran sin sus clientes, y por ende, sin su fuente de ingresos.
Y la lista de los ámbitos de vida, entretenimiento y trabajo donde el 100% de los rusos fueron afectados puede seguir adelante. Y no, un pueblo que está acostumbrado a las penurias no se doblegará ante estas restricciones, pero sí dejará en evidencia una hipocresía a esteroides que muestran los influencers de Occidente en sus declaraciones y acciones, como ha sido el caso de Adam Mosseri.
Una prohibición, que difícilmente puede impactar la vida de las personas en la misma medida que lo hacen las sanciones indiscriminadas, que van dirigidas a todos los estratos de la población rusa, de todas las clases sociales y de todos los ámbitos.
Cabe señalar también que dichas sanciones hacen daño no solo a los ciudadanos rusos ordinarios, sino también a los europeos también. Baste con mencionar solo a los camioneros de España e Italia, que se convirtieron en las primeras víctimas de las sanciones antirrusas.
Y es que estas dispararon los precios de los hidrocarburos a niveles que no se han visto en muchos años, lo cual llevó también al encarecimiento de la gasolina.
"El 90% de las empresas de transporte (medianas y pequeñas) nos encontramos en una situación económica de quiebra total, al igual que las condiciones laborales son de total precariedad en todos los sentidos. Consecuencias que pagan de manera directa todos los conductores asalariados a los cuales defenderemos en las demandas exigidas", denuncia la Plataforma Nacional para la Defensa del Sector del Transporte de Mercancías por Carretera.
Debido a ello, los camioneros de España e Italia declararon una huelga general e indefinida a partir del 14 de marzo. Esto, a su vez, llevará a una grave crisis logística, que acabará afectando a los demás sectores y finalmente a los ciudadanos.
Pero no, esto no está mal: es mucho peor el bloqueo de una red social que incita la violencia contra los ciudadanos de un país, considera Adam Mosseri.
Lo que realmente está mal, es que haya individuos que consideran que está bien cancelar a deportistas rusos, artistas rusos, poetas rusos, músicos rusos y a los rusos en general y solo preocuparse por su bien cuando este está relacionado con las ganancias de su propia empresa, como es el caso de Adam Mosseri.
No es el Gobierno el que ha bloqueado al Instagram en Rusia, sino sus propios ejecutivos, que consideran que está bien permitir las llamadas a la violencia contra los ciudadanos de un determinado país. Que consideran, que para la imposibilidad de utilizar es una red social es más dañina para un pueblo, que el hecho de que esta misma red social se use como plataforma que incita al odio y violencia contra este mismo pueblo.