No existía Facebook ni WhatsApp. La telefonía celular estaba en vías de desarrollo y sólo unos pocos contaban con aparatos móviles. Las redes sociales sólo existían en los laboratorios de alguna universidad de Estados Unidos.
Fue lanzado por Microsoft en 1999 y sus últimas actualizaciones llegaron hasta el 2011 cuando la empresa lo fusionó con Skype.
No existía Facebook ni WhatsApp. La telefonía celular estaba en vías de desarrollo y sólo unos pocos contaban con aparatos móviles. Las redes sociales sólo existían en los laboratorios de alguna universidad de Estados Unidos.
Corrían los primeros años de los 2000 y en la República Argentina el servicio de conexión a Internet crecía año a año. Primero con el sistema “dial-up” (basado en telefonía fija) y luego con la banda ancha, los hogares argentinos se conectaban al mundo.
En este contexto surgió un programa (en aquel entonces se usaba ese término para lo que hoy se nombra como App o aplicación) de mensajería instantánea que conectaba a usuarios registrados de cualquier parte del mundo para compartir texto, imágenes y sonidos.
Fue una plataforma donde se comenzó a utilizar y, con el tiempo, a popularizar el uso de emojis; íconos dibujados con colores para representar alguna expresión emocional (felicidad, tristeza, entre otras).
Fue así que los jóvenes comenzaron a bucear en esta novedosa plataforma que permitía compartir momentos, algunos bastantes largos, entre amigos, compañeros de escuela, colegas del trabajo y gente conocida.
Se popularizó entonces el término “chatear”, una castellanización del término en inglés “chat” (charlar). Pasaron los años y la Real Academia Española lo incorporó al diccionario y desde 2014 está oficializado como vocablo aprobado.
También aparecieron algunas aplicaciones no oficiales que permitían cambiar colores, agregar estados y la original idea de mostrar qué música estaba escuchando el usuario.
El “Messenger” permitía a los usuarios agregar amigos a su lista de contactos para chatear en tiempo real, y también ofrecía la posibilidad de enviar mensajes offline a usuarios que no estuvieran en línea en ese momento. La primera versión se llamó "MSN Messenger Service" y estaba disponible solo para usuarios de Windows. Con el tiempo, se lanzaron versiones para otros sistemas operativos.
A lo largo de los años, el programa introdujo varias características populares, como la posibilidad de mostrar el estado de conexión (en línea, ausente, ocupado, etc.), la posibilidad de enviar archivos y fotos, la posibilidad de personalizar la apariencia de la ventana de chat con skins y lo dicho: los emoticonos.
El Messenger también ofrecía la opción de realizar videollamadas y llamadas de voz, aunque estas características no fueron tan populares como la función de chat.
No hay una cifra exacta de cuántos usuarios tuvo MSN Messenger en su momento más popular, pero se sabe que fue una de las aplicaciones de mensajería instantánea más utilizadas en todo el mundo.
En su apogeo, en la década de 2000, se estima que MSN Messenger tenía más de 330 millones de usuarios activos mensuales en todo el mundo. En algunos países, como Brasil, era incluso más popular que otros servicios de mensajería instantánea como AIM o Yahoo Messenger.
La masificación de las redes telefónicas móviles, con el 3G como gran estrella y el abaratamiento de los costos de los aparatos inteligentes (smartphones) le pisaban los talones al mensajero de Microsoft que ya tenía una década en la espalda.
En paralelo, dos ex empleados de Yahoo lanzaron en 2009 al mercado WhatsApp, una aplicación de mensajería instantánea para teléfonos inteligentes. La app se convirtió rápidamente en una de las más populares del mundo, gracias a su sencillez, rapidez y facilidad de uso.
La caída del Messenger empezó con la fusión con Skype. En 2013, Microsoft anunció que MSN Messenger sería descontinuado y reemplazado por Skype, otro servicio de mensajería instantánea propiedad de Microsoft. La transición a Skype se completó en 2014, y desde entonces MSN Messenger ya no está disponible.
Ese mismo año WhatsApp fue adquirido por Facebook por una cifra récord de 19 mil millones de dólares. Desde entonces, la plataforma ha seguido creciendo en popularidad y se ha convertido en una herramienta de comunicación esencial para muchos usuarios de teléfonos inteligentes.
ICQ fue uno de los primeros programas de mensajería instantánea en línea, desarrollado por la empresa israelí Mirabilis en 1996. ICQ significa "I Seek You" (te busco) y se convirtió rápidamente en una forma popular de comunicación en línea en la década de 1990.
ICQ permitía a los usuarios enviar mensajes de texto, archivos y mensajes de voz en tiempo real a otros usuarios de ICQ en todo el mundo. También permitía la creación de listas de amigos, la configuración de estados de conexión y la personalización de la apariencia del programa.
ICQ fue uno de los primeros programas en ofrecer la funcionalidad de "presencia en línea", lo que permitía a los usuarios saber cuándo sus amigos estaban en línea y disponibles para chatear.
Mirc32 es un cliente de IRC (Internet Relay Chat) que fue desarrollado por Khaled Mardam-Bey en 1995. IRC es un protocolo de comunicación en línea que permite la comunicación en tiempo real entre usuarios en canales de chat temáticos.
Mirc32 permitía a los usuarios conectarse a redes de IRC y participar en conversaciones con otros usuarios en tiempo real. Los usuarios podían unirse a diferentes canales de chat, enviar mensajes privados a otros usuarios y enviar archivos.
Mirc32 también ofrecía una amplia gama de opciones de personalización, como cambiar la apariencia del programa, crear macros para automatizar tareas y configurar opciones de sonido y notificación.
Mirc32 fue muy popular en la década de 1990 y principios de la década de 2000 como una forma de comunicación en línea y se considera uno de los clientes de IRC más populares de su tiempo. Sin embargo, con el tiempo, ha perdido popularidad frente a otras formas de comunicación en línea, como las redes sociales y la mensajería instantánea.
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