El 24 de noviembre del año pasado, tres cervecerías de Mar del Plata anunciaban un novedoso proyecto. En sintonía con las tendencias en el mundo de la elaboración artesanal, decidieron hundir en el mar barricas con una producción de 600 litros.
Lo recaudado con la venta de la cerveza sería donado al Museo de Ciencias Naturales "Lorenzo Scaglia" de la ciudad balnearia
El 24 de noviembre del año pasado, tres cervecerías de Mar del Plata anunciaban un novedoso proyecto. En sintonía con las tendencias en el mundo de la elaboración artesanal, decidieron hundir en el mar barricas con una producción de 600 litros.
El objetivo, explicaron, era que el proceso de envejecimiento se concretara bajo la presión del agua, a unos 20 metros de profundidad. Los barriles fueron depositados en una jaula, sujetada sobre la cubierta del buque pesquero "Kronomether", varado desde 1991 y hundido a tres millas del puerto de Mar del Plata desde hace seis años.
La iniciativa tenía un condimento extra. Lo recaudado con la venta de la cerveza sería donado al Museo de Ciencias Naturales "Lorenzo Scaglia" de la ciudad balnearia.
El proyecto sufrió un duro golpe en las últimas horas. Carlos Brelles, integrante de la ONG Thalassa Buceo y quien estuvo en el operativo de sumergir las jaulas donde estaban los barriles de cerveza, denunció el hecho en su muro de la red social Facebook.
"Difícilmente salgamos de la crisis en la que estamos inmersos si seguimos considerando VIVOS a los VILLANOS.Un ladrón no es un vivo, es un ladrón.
Y hubo dos o tres de esos vivos que en este último mes se tomaron el trabajo de navegar hasta un barco hundido y, tras bucear a a 20 metros de profundidad, robaron barricas donde se estaba macerando cerveza", contó Brelles en su red social.
La producción había sido elaborada por las cervecerías Heller, La Paloma y Baum. El operativo para sumergir las barricas fue realizado por integrantes de una escuela de buceo de Mar del Plata, Prefectura y una empresa de remolque que colaboraron con el propósito solidario.
Todos ellos tenían planificado participar a fin de este mes en los trabajos para rescatar la cerveza de buque hundido y continuar con el proceso de elaboración. Pero cuando los buzos llegaron al lugar, descubrieron que las barricas ya no estaban. Habían sido robadas.
"Se fueron los sueños de macerar cerveza en el fondo del mar. No robaron barricas, robaron la esperanza de empresarios y asalariados que no pasaron un muy buen año", aseguró Brelles.
Y agregó: "Robaron la posibilidad de recaudar fondos que serían destinados a comprar instrumental para el Museo de Ciencias Naturales de Mar del Plata, como así también robaron la esperanza de estudiantes universitarios que habían colocado paneles para el estudio de las comunidades marinas, y de esa manera aprender más de nuestra fauna".
Los emprendedores que impulsaron el proyecto están sorprendidos. “No se puede tomar esa bebida directamente de las barricas. Hay que mezclarla con otra que tenemos en tanques acá en tierra, gasificarla, y demás. Por ahí no se las robaron las barricas pero sí las quisieron extraer del agua pensando que eran otra cosa y después las dejaron sueltas y ahí la marea se las llevó”, explicó Juan Pablo Vincent, propietario de Baum.