La localidad cordobesa de San Roque fue protagonista este domingo de una nueva fiesta clandestina, en esta ocasión, en el boliche ‘’La Estación’’. El detalle de este evento, es que albergó al menos 850 y las autoridades ni siquiera la suspendieron.
La localidad cordobesa de San Roque fue protagonista este domingo de una nueva fiesta clandestina, en esta ocasión, en el boliche ‘’La Estación’’. El detalle de este evento, es que albergó al menos 850 y las autoridades ni siquiera la suspendieron.
La Unidad Regional Departamental Punilla informó que la fiesta tenía la habilitación correspondiente, pero fue intervenida porque se había superado la capacidad máxima. Sin embargo, el personal sólo pidió que se bajara el volumen de la música, permitiendo que continuara la fiesta.
Los mismos vecinos son los que se comunicaron con la policía comunal luego de percibir los sonidos festivos provenientes del predio ubicado en la Ruta E-55. Al no poseer los decibelímetros para medir la música, solicitaron la colaboración de la policía municipal.
El jefe comunal de San Roque, Jorge Bustamante, fue consultado por el descontrol del fin de semana y expresó: "la cantidad de gente que tenían habilitada era un poco más de 900, aunque el número oficial es 850".
Además, Bustamante indicó que los responsables deberán responder y hacerse cargo por los desmanes. A pesar del caos en ‘’La Estación’’, el jefe comunal solo trato a la situación como un ‘’pequeño desborde’’ que se comunicó a la fiscalía.