Graciela Sosa, la madre de Fernando Báez Sosa, habló ante el Tribunal de Dolores minutos antes del alegato de Hugo Tomei, abogado de los ocho rugbiers imputados, y dijo que "nunca" pensó estar "en este lugar".
Antes de escuchar los alegatos de parte de la defensa de los ocho acusados, la madre de Fernando Báez Sosa tomó la palabra y se dirigió a la jueza María Claudia Castro con un sentido mensaje de dolor.
Graciela Sosa, la madre de Fernando Báez Sosa, habló ante el Tribunal de Dolores minutos antes del alegato de Hugo Tomei, abogado de los ocho rugbiers imputados, y dijo que "nunca" pensó estar "en este lugar".
"Nunca pensé que estaría en este lugar. Siempre pensé que algún día se recibiría y estaría viendo como iba a defender a las personas y no estar acá por su asesinato", expresó.
Visiblemente conmocionada, Graciela agregó: "Me costó mucho estar en este lugar. Cargué la valija para venir a Dolores y tuve que ver los videos reiteradas veces de cómo asesinaron a mi hijo".
La madre de Fernando dio sus últimas palabras del juicio mientras era abrazada fuertemente por Silvino, el padre de Fernando: "Nunca lo voy a poder olvidar cuando mi hijo levantaba la mano para pedir suplica. Quería tirarme encima de él para que no lo atacaran más".
En su breve testimonio, Graciela expresó: "Él era decente, no hacía el mal. Siempre me decía que no creía en la maldad y ahora quiero justicia porque no le tuvieron piedad".