Por Silvia Simmone
Los restos encontrados corresponden a un mastodonte y a un oso perezoso gigante, animales que habitaron en el pleistoceno tardío, entre 50.000 y 10.000 años atrás. Estos hallazgos muestran la necesidad de preservar la cuenca, que no sólo alberga especies autóctonas de la geografía entrerriana, sino que también se encuentran en ella elementos de gran importancia patrimonial.
Por Silvia Simmone
Durante la última semana se dio a conocer un nuevo hallazgo de fósiles concretado en la cuenca del arroyo Perucho Verna. Los restos, recolectados en dos búsquedas diferentes, fueron entregados al Museo de Ciencias Naturales Guillermo Gómez Cadret de la localidad de San José por integrantes de la Reserva Educativa Los Teros.
Jaime Borda, guardafuna, docente y especialista en conservación, explicó que los fósiles hallados fueron localizados en el lugar cuando la cuenca del arroyo estaba muy baja, lo que permitió retirar los restos y luego organizar otro operativo de búsqueda en la misma zona.
“El hallazgo sucedió en agosto pasado y lo hizo el señor Cristian Moreira, de San José, quien los encontró en una parte del arroyo que corresponde a esa localidad. Él enseguida se comunicó conmigo para informarme, por lo que ese mismo día fuimos al lugar y recuperamos parte de los restos de un oso perezoso gigante, del que también hallamos un diente. Luego sucedió que el arroyo creció, y para poder seguir buscando la cuenca debía estar baja, por lo que los operativos se demoraron hasta fines de noviembre. Cuando volvimos a ir lo hicimos con una comisión de brigadistas de la Reserva, que la mayoría son chicos que estudian en la escuela secundaria Nº10 Juan Bautista Alberdi, de El Colorado; con la directora del Museo de Ciencias Naturales de San José y también nos acompañaron dos personas que forman parte de la comisión de amigos de la Reserva. Allí, Enzo Quintana, uno de los alumnos de la escuela, localizó piezas dentarias de un elefante gigante, conocido como mastodontes, y también se hallaron otros huesos que eran más contemporáneos, por lo que no presentaban importancia paleontológica. En esta jornada de búsqueda creo que lo más importante fue el trabajo en conjunto con el Museo, y también la oportunidad que tuvimos de realizar otro tipo de actividades con los brigadistas, como el ‘buceo libre’, para ver si encontrábamos más restos”, detalló el docente.
Estos hallazgos son los segundos que se realizan en el año, ya que en mayo se había encontrado el cráneo de un mastodonte en otra zona del arroyo más cercana a Pueblo Liebig. Tanto en esa oportunidad como en la que aconteció estas últimas semanas, los integrantes de la Reserva estuvieron en comunicación con el Centro de Investigaciones Científicas, Conicet de Diamante, quienes identificaron los restos hallados.
Proteger el Peruncho
Desde hace siete años, la escuela Juan Bautista Alberdi está intentando impulsar el proyecto “Custodios del Arroyo”, el cual busca que se declare a la cuenca del Perucho Verna como un corredor biológico de importancia para la región, por las especies de flora y fauna autóctona que conviven en su cauce y en cercanías.
“Creo que esto ayuda al proyecto porque no sólo estamos hablando de proteger los animales vivos que existen aquí como el gato montés, los cuervillos, las espátulas, las tortugas, ahora también estamos hablando de que aquí sin dudas hay patrimonio paleontológico. Hace unos días estuve hablando con el senador Santa Cruz que es quien va a impulsar el proyecto de la Reserva de Usos Múltiples de Arroyo Perucho y él coincidía con la importancia de proteger también toda esta parte histórica. Para esto estamos trabajando con otros especialistas, con equipos de los Clubes de Observadores de Aves, profesionales y docentes de distintas especialidades, porque uno de los temas más complejos es el de delimitar la zona de la Reserva que se va a proteger. Se está analizando si va a ser la zona de inundación, es decir mil metros de cada lado o un territorio mayor, porque el tema es que muchos campos aledaños a la cuenca son privados. El arroyo nace en cercanías de Villa Elisa y se extiende hasta Liebig donde desemboca en el río Uruguay, por lo que el área que se protegerá es extensa. Una de las técnicas que se está evaluando es la de delimitarlo de acuerdo con el recorrido de la fauna, es decir con el recorrido que corresponde a los animales, y allí estamos hablando que el área sería desde la costa hasta los márgenes, porque por ejemplo un zorrito común puede transitar desde 500 a 3.000 metros de recorrido, entonces hay que buscar el equilibrio”, explicó Borda.
Sobre el tema de los campos privados el conservacionista destacó que lo único que piden a los propietarios es que no fumiguen ni desmonten, y que de concretarse el proyecto éstos tendrán un descuento en los impuestos y sumarán seguridad a sus campos, ya que los guardafaunas custodiarán la zona permanentemente.
Educación para la conservación
Otro de los proyectos de importancia que se impulsan desde la Reserva es la creación de la Tecnicatura en Guardaparques, la cual contaría como la primera carrera universitaria en la disciplina que tendrá la provincia. “Durante este año estuvimos presentando todo lo que nos pidió el Consejo General de Educación para poder poner la carrera en marcha. La semana pasada recibimos la grata noticia de que el proyecto ya tiene número de expediente y que está en proceso de evaluación. Cuando el CGE nos devuelva lo que presentamos le haríamos los arreglos que nos soliciten y ya estaríamos en condiciones de empezar el próximo año. Martín Müller, presidente del CGE, manifestó su interés en que la carrera comience a dictarse el próximo año por lo que esperamos que entre marzo y julio del año que viene ya puedan comenzar las instancias formativas las cuales serán con una doble modalidad: una práctica que se desarrollará en Reservas, Parques y Áreas protegidas, y otra teórica que tendrá la modalidad de cursado asincrónico”, adelantó Borda.
Novedades para la temporada
Se anunció que para las vacaciones se pondrán en marcha recorridos nocturnos en la Reserva, los cuales se realizarán con linternas de luz verde y buscarán dar a conocer los comportamientos nocturnos de la fauna que alberga el área natural.