La muerte de más de 40 lobos marinos en Necochea desencadenaron inquietud, llevando al Senasa a iniciar una investigación para determinar si estos decesos están relacionados con un posible brote de influenza aviar.
El Senasa informó sobre la toma de pruebas para confirmar la enfermedad, mientras solicitan evitar cualquier aproximación a los animales.
La muerte de más de 40 lobos marinos en Necochea desencadenaron inquietud, llevando al Senasa a iniciar una investigación para determinar si estos decesos están relacionados con un posible brote de influenza aviar.
Imágenes de los animales fallecidos en las playas cercanas al puerto de Quequén comenzaron a circular en las redes sociales, junto con videos que mostraban a los lobos marinos en estado de convulsión. Ante esta situación, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) actuó rápidamente.
Las autoridades están explorando la posibilidad de un brote e iniciaron investigaciones en busca de respuestas. Mientras tanto, instó a la gente a evitar acercarse a los animales y a no interferir con el operativo en curso.
La tarea de investigación recae en el Centro Regional Buenos Aires Sur, que trabaja en colaboración con la regional local del Consorcio Portuario, expertos del Instituto de Investigaciones Marinas y Costeras de la Universidad Nacional de Mar del Plata y el Conicet.
María Génova, directora de Gestión Ambiental de Necochea, informó que entre 40 y 50 lobos marinos se encuentran muertos o en estado moribundo. Se espera que los resultados de las investigaciones se divulguen en las próximas 24 a 36 horas. Hasta entonces, se exhortó a la gente a mantenerse alejada de los ejemplares y no entorpecer las labores en marcha.
La hipótesis planteada se basa en un incidente previo donde siete mamíferos marinos fallecieron en playas de Río Grande, confirmando un brote de influenza aviar.