El Litoral
El presidente Mauricio Macri aseguró que, desde la oposición, "se desesperan" porque Cambiemos tenga un mal resultado en las próximas elecciones y en la conducción del Gobierno, opinó que la Argentina "necesita que por un tiempo tiremos todos para el mismo lado".
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Télam
El jefe del Estado apuntó a sectores de la oposición al asegurar que éstos "se desesperan porque nos vaya mal. La verdad es que Argentina necesita que por un tiempo tiremos todos para el mismo lado, y después competiremos para ver quién lo hace mejor. Estas actitudes especulativas, ventajistas, no son buenas", afirmó el mandatario.
Macri también volvió a dar por hecho un triunfo "por mucho" de Cambiemos en las legislativas de octubre, como así también la multiplicación de la llegada de las inversiones al país, tras esa instancia electoral.
"Una vez que confirmemos los argentinos ahora en octubre la vocación de cambio, (las inversiones) se van a multiplicar varias veces más", pronosticó el mandatario, quien estimó que la coalición oficialista ganará "por mucho a nivel nacional" y dijo esperar lo mismo en la provincia de Buenos Aires "aunque sea por poco", luego de reconocer que, en ese distrito, "están muy parejos los números" en las encuestas.
Así lo expresó en una entrevista difundida hoy por medios del Grupo Diarios Bonaerenses y en otra difundida anoche por la agencia internacional Reuters, en las que el mandatario dejó abierta la posibilidad de presentarse a competir en el 2019 por su reelección al afirmar que está "abierto" a "acompañar a los argentinos el tiempo que ellos decidan, hasta un máximo que plantea la Constitución, que son ocho años", aunque dijo que, para eso "falta mucho tiempo".
En ese marco, dijo que, junto a "todo el equipo" comparte una "visión optimista" sobre las próximas Paso y sobre las legislativas de octubre porque entiende que "una mayoría de argentinos va a ratificar el cambio que decidimos hace dos años", con lo cual -estimó- a Cambiemos le va a ir "bien" en las urnas.
No obstante, dijo ser "el primero en saber que todo lo que hemos hecho mucha gente todavía no lo siente como realidad económica", y que "ha sido un año muy duro", pero consideró que, al asumir su gestión, el país estaba "al borde de estrellarse" y, entonces, postuló, "uno no construye mágicamente una realidad distinta en meses".
"Mi desesperación, cada noche que me voy a dormir, es qué más pude hacer para que otro habitante de la Argentina tenga una mejor oportunidad. Soy el primero en desesperar de ansiedad para que esto vaya más rápido, pero cuesta cambiar la dirección de un país. Empezamos a tomar velocidad: arrancó el campo, después la industria automotriz, la energía, la construcción", enumeró el mandatario.
Por otro lado, Macri remarcó que "Argentina no es el Gran Buenos Aires" sino que es "más grande", y se quejó de la existencia de una mirada desde el "unitarismo" de la cual -dijo- hay que desprenderse.
"En la Argentina, Cambiemos va a ganar por amplia mayoría. Acá hemos focalizado todo en una elección. Ella (en alusión implícita a la ex presidenta y primera precandidata a senadora nacional por Unidad Ciudadana en la provincia de Buenos Aires) va a perder en el 80 por ciento de todas las intendencias y en cuatro o cinco tiene una concentración de votos que la hace ser competitiva, pero, a nivel nacional, va a sacar menos del 20 por ciento", evaluó el presidente.
Además, volvió a destacar la figura de la gobernadora María Eugenia Vidal al sostener que, con su gestión, la provincia de Buenos Aires "salió de la mediocridad, de la connivencia con las mafias, de la especulación para ver si podían ser presidentes o no, en vez de defender a los bonaerenses".