A partir de este fin de semana, junto con el hisopado que deberán realizarse al llegar a los aeropuertos de Ezeiza o Aeroparque, los viajeros que residan en Neuquén deberán aislarse en sus hogares independientemente del resultado que arroje el test.
Tras la aparición de nuevas cepas y la inevitable llegada de la segunda ola de coronavirus, Neuquén decidió implementar nuevas medidas e intensificar los controles para todos aquellos viajeros que regresen desde el extranjero.
A partir de este fin de semana, junto con el hisopado que deberán realizarse al llegar a los aeropuertos de Ezeiza o Aeroparque, los viajeros que residan en Neuquén deberán aislarse en sus hogares independientemente del resultado que arroje el test.
En el caso de que den negativo, tendrán permitido regresar a la provincia con la condición de que luego deberán permanecer en cuarentena durante siete días. Mientras que, si el hisopado es positivo deberán permanecer en Buenos Aires hasta que las autoridades de salud les otorguen el alta médica.
Para poder controlar a los viajeros que ingresen a Neuquén, o a las demás jurisdicciones de Argentina, la Dirección Nacional de Migraciones diseñó un mecanismo que consiste en informar a las autoridades provinciales sobre el arribo de las personas que provienen de otro país e identificarlas a través de un usuario.
Además, cada viajero deberá completar una declaración jurada, donde se compromete a realizar los siete días de aislamiento preventivo e informar en que dirección se encontrará.
La situación epidemiológica de Neuquén
Por el momento la curva de contagios en Neuquén se mantiene estable y la situación epidemiológica es favorable. Desde el inicio de la emergencia sanitaria, la provincia acumula 66.672 casos de Coronavirus, de los cuales 2.337 están activos actualmente, 63.112 personas ya se recuperaron y 1.223 neuquinos, lamentablemente, perdieron la vida. En cuanto a la ocupación de camas, hay 78 pacientes internados en unidades de terapia intensiva y el porcentaje de ocupación se mantiene en 75%.