Brigadistas de Entre Ríos, Santa Fe y el Ejército trabajaron todo el fin de semana, a través de medios aéreos y náuticos, en las islas del Delta del río Paraná para sofocar los focos de incendio en la zona, informó la Secretaría de Ambiente de Entre Ríos.
Los operativos se realizaron en zonas de islas frente a Villa Constitución, provincia de Santa Fe, donde se atacaron focos ígneos producidos en los últimos días, con la participación de un helicóptero y embarcaciones de la Nación.
La bajante histórica del río "prevé la generación y propagación de focos ígneos en la zona", advirtió la secretaria de Ambiente de Entre Ríos, Daniela García.
La funcionaria provincial llamó a realizar "acciones cotidianas que cada uno, desde su lugar, puede hacer para cuidar el recurso del agua" como "minimizar su consumo, evitar el derroche y no prender fuego", en la zona.
"Esta situación remite a un cambio climático global, no es un evento esporádico, que se estima hasta noviembre pero es muy incierta la previsión de lluvias en la cuenca alta de Brasil", afirmó García.
Desde el comando de operaciones nacional, instalado en Villa Constitución, se realizaron los vuelos de patrullaje y detección de focos ígneos, para luego trasladar a los brigadistas para combatir el fuego.
Allí trabajaron más de 40 personas, entre personal técnico, operativo y logístico de Protección Civil y del Ministerio de Salud de Santa Fe; brigadistas forestales de Bomberos Voluntarios y Policía de Entre Ríos; y personal técnico del Plan de Manejo del Fuego de Entre Ríos.
También participó personal municipal de Villa Constitución; de Parques Nacionales (APN); de Guardia Rural los Pumas (Santa Fe); del Centro de Monitoreo Meteorológico y Climático; y de Bomberos Voluntarios de Villa Constitución.
Para ello debieron utilizar embarcaciones de Parques Nacionales (APN), Prefectura y del Ministerio de Ambiente y Cambio Climático, y el helicóptero del Ejército Argentino.
El Gobierno de Entre Ríos recordó que aún se encuentra vigente la prohibición de realizar cualquier tipo de quemas sin autorización ya que pesa sobre la zona una medida cautelar del Juzgado Federal de Paraná que prohíbe de manera "absoluta, acciones humanas con capacidad de alterar el medio ambiente".
Durante 2020, los incendios en esa zona provocaron graves daños y gran cantidad de humo y cenizas que cubrieron a varias ciudades por lo que la provincia de Entre Ríos inició causas judiciales ya que consideró que fueron generados para "obtener rebrote como forraje para el ganado, limpieza de la zona y pesca y caza".
En ese momento, el gobernador, Gustavo Bordet, decretó la emergencia ambiental por "la degradación de los humedales y los efectos negativos en la salud".
También se instalaron torres de videovigilancia, y la Nación envió aviones hidrantes, helicópteros y personal para reforzar las acciones sobre los incendios que se sumaron a brigadistas de distintas fuerzas de Entre Ríos, Chubut y Neuquén, quienes evitaron incendios de viviendas y salvaron animales autóctonos.