Sábado 4.4.2020
/Última actualización 10:51
Las aeronaves habían partido desde Buenos Aires rumbo a la ciudad peruana de Arequipa a las 7,30 y 8, respectivamente, donde aterrizaron después del mediodía y emprendieron el regreso a las 17,30 y 18 (hora argentina) para tocar pista en El Palomar a las 23,15 y 23,40 con 140 argentinos que se encontraban en Cusco, donde, según indicaron fuentes de Cancillería a Télam, quedarían solamente 80 ciudadanos nacionales por repatriar.
Para poder abordar estos vuelos, los viajeros debieron primero recorrer por tierra los 550 kilómetros que separan a Cusco de Arequipa, ya que las aeronaves de la Fuerza Aérea no podían acceder la ex capital del imperio Inca, debido a que la altura de esa ciudad, hace imposible cualquier operación aérea de estas características.
Fuentes de la Cancillería señalaron a Télam que la repatriación de argentinos en Cusco se había tornado prioritaria debido a que quienes allí estaban y los que aún quedan, ven dificultada su permanencia, por un lado porque cuentan con muy pocos recursos económicos para su subsistencia, a lo que se suma una marcada y creciente hostilidad de parte de los habitantes del lugar.
Las fuentes explicaron que la otra razón que dificulta las operaciones, es que Perú se encuentra altamente militarizada y solamente se permiten cuatro vuelos diarios sobre su espacio aéreo, siempre supervisados por control militar, lo que obliga a coordinar con otros países las operaciones para repatriar a los aún más de 300 argentinos que se encuentran en distintos puntos, pero sobre todo en Lima y Cusco.
TélamEstos vuelos de repatriación, se suman a otros similares ya realizados por la Fuerza Aérea Argentina a Perú con tres vuelos de aviones Hércules C-130, dos a Lima y uno anterior a la misma Arequipa.
La nueva operación se encuentra enmarcada dentro de las disposiciones del Poder Ejecutivo, que establecen límites al reingreso de personas mediante transporte aéreo y en los que Cancillería seguirá coordinando junto al Ministerio de Salud de la Nación y a la División Salud de la sede diplomática, las prioridades de embarque por edad, cuestiones de salud o razones humanitarias.
Mientras tanto, en el marco de los denominados "corredores seguros", esta noche, a las 22,06, arribó al aeropuerto internacional de Ezeiza, un avión Boeing 747-800 de la compañìa Lufthansa que salió de Frankfurt, con 330 argentinos a bordo, procedentes de diferentes puntos de Europa.