El fiscal federal Guillermo Marijuan imputó a la presidenta del Banco Nación, Silvina Batakis, y a la gerenta general, María del Carmen Barros, debido a las contrataciones de familiares y otras personas en la entidad bancaria.
La funcionaria fue acusada de incumplimiento de deberes públicos, fraude contra la administración y peculado.
El fiscal federal Guillermo Marijuan imputó a la presidenta del Banco Nación, Silvina Batakis, y a la gerenta general, María del Carmen Barros, debido a las contrataciones de familiares y otras personas en la entidad bancaria.
La imputación surge a raíz de una denuncia presentada por la dirigente de la oposición Graciela Ocaña, que acusa a los funcionarios de cometer delitos como incumplimiento de los deberes de funcionario público, defraudación contra la administración pública por administración fraudulenta y peculado.
Según la denuncia, Batakis y Barros habrían contratado a Verónica Laura Asad, conocida como 'Pitty, la numeróloga', para un curso de coaching por un monto de 1.800.000 pesos sin contar con el aval del directorio del Banco Nación.
Además, se cuestiona la designación de Héctor Javier Silva, ex marido de Silvina Batakis, como Gerente de Sistemas del BNA, así como el nombramiento de Juan Pablo Pedemonte, hijo de María del Carmen Barros, en una gerencia en la casa matriz del Banco Nación.
También se menciona el nombramiento de Maximiliano Piantanida, amigo de María del Carmen Barros, como Gerente Departamental del Banco Nación y el sueldo mensual de 900 mil pesos que la titular del Banco permitió a Barros cobrar.
Graciela Ocaña ha denunciado que las contrataciones y el manejo de dinero público en estas circunstancias revelan una impunidad inaceptable por parte de los involucrados.
La numeróloga admitió haber recibido 1,8 millones de pesos por servicios de asesoría, aunque alega que simplemente fue contratada y que no tiene ninguna responsabilidad en la situación.