Una feroz tormenta sacudió a la provincia de Corrientes en la madrugada de este domingo, dejando a casi toda la ciudad capital bajo agua y con serios daños estructurales aunque afortunadamente sin lamentar víctimas.
Desde la intendencia informaron que evacuarán a personas de las zonas más afectadas tras la caída de más de 250 milímetros y fuertes ráfagas de viento en pocas horas.
Una feroz tormenta sacudió a la provincia de Corrientes en la madrugada de este domingo, dejando a casi toda la ciudad capital bajo agua y con serios daños estructurales aunque afortunadamente sin lamentar víctimas.
En la mañana de este domingo la Municipalidad de Corrientes indicó que la ciudad atraviesa "la peor catástrofe natural de la historia", luego del temporal en el que cayeron más de 250 milímetros en pocas horas, dejando numerosas viviendas tapadas por el agua.
Las autoridades municipales de Corrientes anunciaron que evacuarán personas de las zonas más afectadas por los anegamientos causados por las precipitaciones que entre las 2 y las 6 de esta madrugada ocasionaron la caída de 200 milímetros.
A través de un comunicado, la gestión del intendente Eduardo Tassano aseguró que "una catástrofe natural alcanzó a la ciudad esta madrugada causando colapso en los sistemas de desagües dada la cantidad de agua caída y los fuertes vientos en muy corto período de tiempo". Y subrayaron que se trata de la "peor catástrofe natural desde que existen registros oficiales".
En el comunicado se enumeraron anegamientos e inundaciones en calles y viviendas, voladuras de techos, caída de postes, muros, árboles, carteles, entre otros que demandarán trabajos de reconstrucción y asistencia durante "las próximas 48 horas", dijo el subsecretario de Riesgos y Catástrofes municipal, José Ruiz.
"Es como descargar un tanque de 500 litros en una bacha de cocina de una vez, claramente va a colapsar", comparó el funcionario y resaltó que fueron superados los 250 milímetros de lluvia durante toda la mañana del domingo.
También se registraron intensas ráfagas de viento de hasta 38,6 kilómetros por hora, lo que dejó como saldo la caída de un histórico mural del convento de San Francisco sobre la plaza Italia, en el microcentro, así como voladuras de techos en el campus de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE), en el norte de la ciudad.
A esta postal del temporal se sumaron la de autos flotando por las calles, personas trasladándose en bote, casas inundadas y hasta comercios saqueados. Además, hubo numerosos cortes de energía, muchos de los cuales también fueron preventivos hasta que bajara el agua.
"Las distintas áreas se encuentran abocadas a la puesta a punto de los centros municipales de los barrios Anahí y Ciudades Correntinas para la contención de las familias que deberán ser evacuadas temporalmente", agregaron desde la municipalidad que habilitó las líneas de contacto gratuitas al teléfono 147 y el WhatsApp 3794341768 para asistir a la ciudadanía.
Por su parte, el Ministerio de Seguridad de la Nación, coordinó acciones de asistencia y contención de los ciudadanos en emergencia por medio de efectivos de la Prefectura Naval Argentina y la Gendarmería Nacional, Defensa Civil y la Policía de Corrientes.
En medio de la catástrofe natural, medios locales dieron cuenta de que un grupo de personas se lanzó a irrumpir en comercios para robar los insumos mientras tenían el agua hasta las rodillas.
Uno de esos hechos quedó registrado en el saqueo que sufrió una farmacia correntina, que rápidamente se hizo viral en internet, luego de que testigos filmaran lo que estaba ocurriendo.
Aparentemente, los vidrios del local habrían cedido por la presión del agua que había inundado esas arterias, lo que provocó que los cristales estallaran y dejaran sin protección a la farmacia.
Ante este escenario, se reforzaron las recorridas de las fuerzas de seguridad por zonas comerciales en prevención de eventuales actos delictivos colaborando con la tranquilidad de los vecinos respecto de sus bienes y pertenencias, explicitaron a través de un comunicado de prensa.