Las regulaciones en materia de tránsito cordobesas tienen sus diferencias con la ley nacional vigente, a la que Santa Fe adhiere en casi todas sus exigencias. Con el sistema de luces DRL hay confusiones que pueden costar caro.
El destino turísitco tan frecuentado por los santafesinos es famoso por pescar distraídos en operativos de tránsito, casualmente dispuestos a pocos metros de las estaciones de servicio. Quien se olvide de encender las luces bajas deberá pagar de $23.480 a $46.960. Con un "descuento" del 50% si paga en el momento. Claves para no darles el gusto a los inspectores con tonada (y tiqueteras).
Las regulaciones en materia de tránsito cordobesas tienen sus diferencias con la ley nacional vigente, a la que Santa Fe adhiere en casi todas sus exigencias. Con el sistema de luces DRL hay confusiones que pueden costar caro.
Con el aumento del valor del litro de nafta, la Provincia de Córdoba actualizó la escala de multas de tránsito que aplica su Policía Caminera, de acuerdo con una resolución publicada en el Boletín Oficial de esa jurisdicción, que llega justo para las vacaciones de invierno.
El regreso de los santafesinos de sus escapadas a la provincia vecina -y más en temporada alta- suele estar acompañado tanto de lo bello de sus paisajes y conveniente de su oferta turística, como de las desventuras vividas en sus rutas. La tierra de las sierras y sus maravillas también es conocida por el rigor y el sentido de la oportunidad que tienen sus uniformados de la temible Caminera, siempre bien provistos de factureros, para pescar conductores distraidos que olvidan volver a encender las luces bajas luego de cargar combustible. Los operativos -generalmente poco visibles- suelen esperar a los infractores a pocos metros de las estaciones de servicio.
La Ley Provincial de Tránsito 8.560 de Córdoba establece la utilización de Unidades Fijas (UF), que equivalen al menor precio de venta al público correspondiente a un litro de nafta súper, que hoy se encuentra en $ 234,80. En cambio, en la provincia de Santa Fe, el valor de referencia que se toma es el de medio litro de nafta súper.
En el mapa de la bota, desde octubre de 2019, con la sanción de la Ley Provincial N.º 13899 se hicieron menos onerosas las multas. Fue el senador Lisandro Enrico (UCR-Generl López) quien insisitió con la reforma santafesina al encontrar que eran valores "casi confiscatorios" los que se aplicaban al estar atados, en definitiva, al mercado internacional del petróleo y de las energías en general.
En Córdoba, en cambio, la norma vigente tiene esa y otras diferencias con la ley santafesina. E incluso con las regulaciones nacionales. Pero sobre todo, con los criterios con que se lleva a cabo el control.
En Córdoba las multas se dividen en "leves, graves, muy graves y máximas", y con castigos acordes a esas infracciones.
Un ejemplo de multa leve es conducir y fumar a la vez, con valores que ahora van de los $4.696 a $23.480 por aplicación de la mencionada grilla.
Un escalón más arriba, para las infracciones graves el nuevo costo es de $23.480 y $46.960. Y el caso más común es el citado antes: no llevar la luz baja del vehículo encendida.
Luego, las multas por infracciones muy graves implican pagos de entre $46.960 y $93.920. Verbigracia: cruzar semáforos en rojo, conducir a contramano, exceder el límite de velocidad.
Las sanciones máximas están entre $281.760 y $469.600, se aplican a quienes por ejemplo circulen en unidades que no se ajusten a las dimensiones reglamentarias o lo hagan luego de haber consumido estupefacientes, psicotrópicos, estimulantes u otras sustancias análoga. Lo mismo, para el transporte de cargas con exceso de peso.
La regulación nacional obliga a que en todo el territorio argentino se circule con las luces bajas encendidas. Pero luego, se aceptó hacerlo indistintamente con ellas o con las llamadas luces diurnas o DRL, que poseen solo algunos vehículos y cuando las condiciones de visibilidad sean óptimas.
Como esa reforma rige en la ciudad de Buenos Aires desde hace más de cinco años es común recibir mensajes de los medios de comunicación de alcance nacional respecto de lo convenientes que son (para ahorrar energía) las DRL o diurnas.
El primer inciso del artículo 47 de la Ley 27.425 (según los cambios de 2017) determina que "mientras el vehículo transite por rutas nacionales, las luces bajas o las luces diurnas permanecerán encendidas, tanto de día como de noche, independientemente del grado de luz natural, o de las condiciones de visibilidad que se registren, excepto cuando corresponda la alta y en cruces ferroviales", pero Córdoba no ha adherido a esa reforma nacional. Y lo más importante: sus inspectores de tránsito harán cumplir la obligación de encender las luces bajas más allá de la razonabilidad de reemplazarlas por las también muy visibles luces diurnas de los modelos más modernos.
En el fondo, lo que aún no se cumple para facilitar a los conductores sus obligaciones es uno de los objetivos de la Ley Nacional de Tránsito, a la que Santa Fe se ha muy temprano.
Se trata de que "en la forma y plazos que establezca la reglamentación" a cargo del Poder Ejecutivo Nacional "los fabricantes e importadores deberán incorporar a los vehículos un dispositivo que permita en forma automática el encendido de las luces bajas en el instante en que el motor del mismo sea puesto en marcha".
Los conductores de viejos modelos de coches sin tantos avances tecnológicos lo recuerdan: bastaba con poner la llave y darle encendido al motor para que las luces se enciendan, si así había quedado el interruptor.