La aceptación del cuerpo en tiempos de cirugías estéticas
La muerte de Silvina Luna abrió el debate sobre la alteración en la percepción de la propia imagen. Para la psicóloga Carla Korol es esencial desafiar los estereotipos.
La aceptación del cuerpo en tiempos de cirugías estéticas
En relación a la aceptación de nuestro cuerpo y la triste noticia del fallecimiento de Silvina Luna, después de casi 80 días luchando por su vida, tras una mala praxis derivada de una cirugía estética, la psicóloga Carla Korol expresó su preocupación en torno a la percepción distorsionada del cuerpo y los trastornos alimentarios que afectan a muchas personas.
La profesional aseguró que “no está mal hacerse cirugías”, aunque mucha gente “salió a demonizarlas” luego de la muerte de la modelo. Además, observó que "hubo mucha culpabilización hacia la víctima", con comentarios que sugieren que "se lo buscó" debido a su juventud y belleza.
En la misma linea, Korol destacó que vivimos en una sociedad que valora la juventud eterna y ciertos estándares corporales hegemónicos, lo que con frecuencia lleva a cuestionamientos y estigmatización. En su opinión, es esencial desafiar estos estereotipos y trabajar para cambiar esta percepción.
El problema de la percepción distorsionada del cuerpo y los trastornos alimentarios afecta a muchas personas, no solo a figuras públicas como Silvina Luna: "Tenemos un montón de NN que viven en esto y que mueren día a día por este tipo de cuestiones ya sea por mala praxis quirúrgica, a través de una cirugía estética o un tratamiento estético, o por los trastornos de la conducta alimentaria".
La psicóloga señaló que el problema con las cirugías surge cuando se busca encajar en un estándar impuesto por otros.
En este sentido, la psicóloga hizo hincapié en la necesidad de prestar atención a las señales de alarma y buscar ayuda profesional cuando sea necesario: "Hay un momento de la vida, un quiebre en la edad que nos lleva justamente a eso: es la adolescencia, preadolescencia, y después querer ‘encajar’".
Este sentimiento muchas veces “tiene que ver con qué imagen quiero dar al otro, porque la realidad es que no tiene que ver con nosotros sino con querer cumplir con cierto estándar”, sentenció.
De acuerdo a la visión de la profesional las cirugías estéticas en ocasiones contribuyen a mejorar la autoestima. “Si uno se mira en el espejo y desea hacerse un cambio está bien; el problema surge cuando se busca encajar en un estándar impuesto por otros”, sostuvo.
Por otro lado, Korol consideró que la ley de talles puede afectar negativamente la autoimagen de las personas, especialmente aquellas con trastornos alimentarios. "Me parece una cuestión hasta nefasta, de burla hacia los consumidores", manifestó.
Las personas cercanas suelen detectar mejor estos problemas, pero a veces es necesario buscar ayuda profesional, sobre todo cuando existe un trastorno dismórfico.
“Tenemos que entender que esa persona está percibiendo una realidad diferente a la que nosotros vemos, que el espejo le devuelve una imagen distorsionada, por eso es algo que es tan complicado y que tenemos que empezar a hablar”, aseguró la psicóloga.
La ley de talles agudiza el problema
La psicóloga señaló que cuando alguien con trastorno de la conducta alimentaria o que está experimentando problemas con su figura, al momento de comprar ropa encuentra discrepancias en las tallas, puede afectar negativamente su psiquis.
A su juicio, aunque se haya ampliado la oferta de talles, se han reducido las medidas de las prendas. Además, señaló que estos trastornos no se limitan a las mujeres, ya que cada vez más hombres están desarrollando problemas relacionados con la conducta alimentaria.
La profesional comentó que muchas personas actualmente siguen tendencias populares como el ayuno intermitente, que se considera beneficioso y recomendado. Sin embargo, ocultan sus trastornos alimentarios detrás de esta práctica, justificando su falta de comida como parte de su período de ayuno.
Para la profesional ley de talles puede afectar negativamente la autoimagen, especialmente de quienes padecen trastornos alimentarios.
En definitiva, remarcó la necesidad de prestar atención a un problema grave que afecta a muchas personas, un problema que lamentablemente se ilustra con el caso de Silvina, quien se convierte en un ejemplo que nos permite hablar sobre esta cuestión y aumentar la conciencia al respecto.
No existe una solución mágica
En los últimos días, la Sociedad Argentina de Cirugía de la Obesidad y Enfermedad Metabólica (SACO) expresó su preocupación por ciertas publicaciones en redes sociales que promueven expectativas excesivas sobre el tratamiento de la enfermedad a través de nuevas alternativas.
El organismo enfatizó que el tratamiento de la obesidad se basa en la modificación de hábitos alimentarios y la mejora del estilo de vida. Además, existen diversas herramientas terapéuticas que pueden utilizarse de manera individual o combinada, dependiendo del grado de obesidad y su impacto en la salud del paciente.
La idea de que una técnica o medicamento nuevo puede proporcionar una solución mágica es incorrecta y contribuye a perpetuar la noción errónea de que existe una solución rápida para la obesidad. Esta creencia ha contribuido al aumento de la obesidad a nivel mundial.
La entidad subrayó que no existe una única solución para la obesidad, y la mayoría de las veces se requiere la combinación de diferentes enfoques terapéuticos junto con cambios en el estilo de vida para lograr resultados a largo plazo.