Mantener nuestro hogar, finanzas y nuestra vida en orden no es imposible y puede ser clave para nuestro bienestar y el de nuestra familia. Leila Sosa comparte su filosofía y estrategias para revolucionar la vida cotidiana a través de la organización.
La organización es más que un simple acto de limpieza; es una herramienta poderosa para una vida plena. Esta es la filosofía de Leila Sosa, una organizadora profesional de espacios que asegura que el orden tiene el poder de transformar profundamente la existencia de las personas. “Es fascinante ver el cambio de vida que provoca en los demás”, afirmó. “La gente me dice que se siente más liviana y cómoda en su propia casa después de reorganizar su espacio. Pueden encontrar las cosas sin perder el tiempo, hasta pueden vestirse mejor”.
La pandemia revalorizó la forma en la que habitamos el espacio hogareño y eso desencadenó en un boom por reorganizar nuestros lugares. Sin embargo, Leila piensa que se trata más que de una moda efímera.”No es algo que después de haber pensado en el 2020 disminuyó, si no al contrario. Durante el confinamiento tuve clientes con los que trabajé de manera online, a través de fotos. Después me llamaron y pude visitar sus casas, organizar más espacios, hacer los cambios de temporada…la demanda no terminó si no que se fue afianzando”, aseguró a Nosotros.
Orden y cambios
La organización, según Leila, es una herramienta fundamental para enfrentar los cambios: "La vida nos lleva a reencontrarnos, a cambiar internamente... Desde el orden, vamos cumpliendo metas y grandes pasos hacia nuestros sueños".
En el ámbito familiar, Leila enfatizó la importancia del orden para evitar el cansancio y disfrutar de momentos de bienestar: "Todo eso lleva a que la organización familiar no sea un padecimiento y que no lleguemos cansados. Podemos hacer cosas que nos hagan bien".
La organizadora nos reveló su estrategia para gestionar las actividades semanales y mensuales, destacando la importancia de planificar y coordinar los tiempos: "En mi experiencia, tenemos el viernes como día en el que no tenemos ninguna actividad durante el turno tarde. También tratamos de organizar un día al mes para hacer la compra en el supermercado, la verdulería, la carnicería. Estructurar el tiempo y las tareas nos ayuda también a disfrutar del tiempo libre y en familia”, señaló.
A la hora de empezar a trabajar con un cliente, el primer paso es establecer una comunicación clara sobre los objetivos del proyecto. "Lo primero que hacemos es charlar para ver cuál es el objetivo del trabajo", explicó. Este enfoque personalizado garantiza que cada proyecto se adapte a las necesidades específicas de cada persona.
Leila también reconoció la importancia de trabajar en colaboración con otros profesionales, especialmente cuando se trata de abordar problemas más profundos. "Si veo que esa persona me está contando de una patología, les recomiendo primero tratarlo con un profesional de la salud", señaló.
Una de las principales áreas de enfoque es el descarte, que puede ser especialmente desafiante debido al apego emocional a las posesiones.
Una de las principales áreas de enfoque es el descarte, que puede ser especialmente desafiante debido al apego emocional a las posesiones.
Para aquellos con un fuerte apego, Leila adopta un enfoque compasivo y reflexivo. "Tratamos de trabajarlo desde el lugar del entendimiento, del agradecimiento y del dejar ir", explicó. "Es un proceso que puede estar relacionado con pérdidas pasadas, objetivos no cumplidos o simplemente la historia familiar detrás de ciertos objetos".
"Es un proceso que lleva tiempo, puede ser emocionalmente desafiante y cada persona lo resuelve desde su propia perspectiva", destacó. "Trato de ayudarlos a tomar decisiones sobre qué conservar y qué dejar ir”.
Además del descarte, Leila también abordó la cuestión práctica del espacio y la utilidad de las posesiones. "Es importante que las personas entiendan cuánto espacio ocupan ciertas cosas y cuál es su verdadero valor", indicó. "A veces, la ropa que ya no se usa puede tener un nuevo propósito para alguien más, ya sea a través de la venta, la donación o el intercambio en ferias americanas".
El enfoque de Leila Sosa en la organización no se limita solo al ámbito doméstico; también ofrece soluciones prácticas para comercios y emprendimientos.
"Muchas veces, lo que está estancado en un negocio es inversión hecha que no se está ofreciendo al cliente", destaca. "Tratamos de trabajar para maximizar la disponibilidad de productos y minimizar el estancamiento de inventario".
"Recomiendo por sobre todo en lo que es prendas, tener los depósitos vacíos y reutilizar las prendas de temporadas anteriores de manera creativa", señaló. "Es importante recircular el inventario para optimizar la presentación y venta de los productos. "Cuando se está terminando la temporada, ayudamos a promocionar productos con pequeños defectos o productos de temporadas anteriores". "Es una forma de recuperar inversión y evitar el estancamiento", indicó.
Además, ofrece asesoramiento sobre la presentación visual de productos, teniendo en cuenta las preferencias y comportamientos de los clientes. "Conocer a tus clientes, categorizar los productos por tamaño, color y estructura, y mantenerlos accesibles puede hacer una gran diferencia en las ventas", destacó.
Por otra parte, resaltó la importancia de llevar registros precisos tanto en los locales como en el hogar. "La lista de stock es crucial tanto en los negocios como en casa", afirmó. "Nos ayuda a tener un control preciso de lo que tenemos disponible y nos permite planificar mejor nuestras acciones".
Para Leila la organización no solo transforma el espacio físico, sino también la comunicación y la dinámica familiar. "Cuando las familias adoptan hábitos de organización, a menudo mejora su comunicación y relación entre ellos", explicó "Es satisfactorio ver cómo mi trabajo no solo tiene un impacto en el orden del hogar, sino también en la calidad de vida de mis clientes".
El orden es más que asignar un lugar a cada objeto; es un ejercicio de constancia y un desafío a la tendencia humana de acumular. “Es un trabajo constante para no volver a caer en el desorden”.
"No hay mayor satisfacción que ver el cambio positivo que mis clientes experimentan y la retrolalimentación que ellos me aportan”. "Es un privilegio ser parte de ese proceso”, cerró.