Lunes 24.7.2023
/Última actualización 4:11
Apareció un fantasma y abrió cofres muy oscuros: "Yo asumí como gobernador con toda la Legislatura en contra y aun así gobernamos, extorsionados en particular desde el Senado, sacándonos algunas cosas", dijo Antonio Bonfatti, en el reinicio de la reunión luego de que Maximiliano Pullaro saludara uno a uno a todos los presentes.
El fantasma que apareció es el que resume un misterio: un minúsculo partido de cuadros con eje en una ciudad, Rosario, domesticó al radicalismo e hizo que votaran sus candidatos y decidiesen acatar el mandato de ésa minoría por doce años. Más claro, por años expliqué, en soledad, la rareza de un partido de masas, el radicalismo, con fundantes en el siglo XIX y que sigue vivo en el siglo XXI, subyugado por una agrupación cerrada, que decidía y después notificaba.
Hay un ejemplo demoledor. El radicalismo, verdadera mayoría en esa alianza que incluyó a la derecha más rancia (PSD y PDP), aceptó que fuese Hermes Binner (PSP) el candidato a gobernador y enfatizó: Fascendini vice. Binner decidió, por su cuenta: Griselda Tessio. Recién en el tercer mandato socialista, con el radicalismo todavía de "partner", Fascendini fue aceptado.
Extorsión es una palabra que aún un médico sin mucho ejercicio de la profesión, el ex liceísta Bonfatti, como un periodista ignorante de las leyes, como quien esto escribe, la reconocen posible de usar como eje de una denuncia… por extorsión. No hay vuelta atrás. Lo dijo.
La nota la firma Walter Palena. No es un periodista improvisado. Página 17, diario La Capital de Rosario, edición papel del día 22 de julio de 2023. No contiene los mismos términos en la edición en red. La frase de Pullaro, en la misma nota, no es accidental. Tratará de hacer aquello que no pudieron Binner, Bonfatti y Lifschitz. Así aparece en la crónica mencionada.
El candidato radical que arrasó en las Paso provinciales dijo: "Para hacer las transformaciones que a Hermes Binner, Bonfatti y Miguel Lifschitz el peronismo no les permitieron hacer". La construcción de la frase no es gramaticalmente correcta, es una cita textual y se entiende.
Antonio Bonfatti no es un fantasma, es de carne y hueso. De hecho será diputado provincial electo después del 10 de septiembre de 2023, dado el lugar expectante que ocupará en la lista final de la oposición. Es una de las batallas de la elección del 10 de septiembre.
La oposición repite a CFK cuando dijo: "Vamos por todo". Gobernación y ambas cámaras. Si la oposición gana en el rubro diputados provinciales en septiembre, Bonfatti estará más cerca de los primeros puestos y mezclado en el montón de los triunfadores.
No sé quién no ve, en el proyecto de la oposición, la encarnizada lucha por cuatro senadurías que no tiene. Es obvio que va por la gobernación, la mayoría en diputados, que ya tiene, y la mayoría en senadores provinciales, que hoy todavía ostenta el peronismo. El peronismo compite por varias islas y un archipiélago, por el continente la pelea es dificilísima.
Una isla es departamento Rosario, otra el departamento San Lorenzo. Hay dos senadurías más temblequeando. El archipiélago es el número mágico: 28 diputados encabezados, para septiembre, por Omar Perotti. Hasta ahora todas derrotas posibles.
Anda mal el peronismo. Hoy no está ganando ni las islas ni el archipiélago y entonces va un consejo: peleando separados perderán en todos los territorios. El continente, esto es la provincia, vale decir la gobernación, es la canción final de la operita musical "El Hombre de la Mancha", de no mediar milagritos varios.
Ilustración para lectores distraídos: "El hombre de La Mancha" es un musical con libreto de Dale Wasserman, música de Mitch Leigh y letras de Joe Darion. Está basado en la obra de texto para la televisión "Yo, Don Quijote", también de Wasserman, a su vez inspirada en la novela "Don Quijote de la Mancha", de Miguel de Cervantes. Canción final titulada "The Impossible Dream".
Volvamos al fantasma, esto es a la extorsión. Hagamos pie en Bonfatti y su denuncia pública. ¿Qué extorsiones? ¿Dónde, cuándo, cómo y, básicamente, por qué ahora?... 'Cha digo… ¿Por qué mencionarlas ahora?
Es visible que hay un envalentonamiento debido al triunfo en las Paso en el que el arco opositor dobló en votos a las huestes de Perotti/Rodenas, de Lewandowski, de Massa y Rossi en casi todos los rubros. Vamos, la pelea Canal 3 (Seisas) versus Canal 5 (Cavatorta) la está ganando Canal 3. Ambos son concejales, ambos compiten por la senaduría del departamento Rosario. Ambos fueron periodistas. Qué ciudad…qué departamento.
En silencio durante muchos años, Bonfatti reaparece en el tiempo previo a las elecciones de septiembre. Todo lo que diga tiene el valor de quien es: un hombre con un pasado político extraño en Las Parejas, secretario del gobierno municipal de Binner, cuando la intendencia de Rosario realizó entregas de licitaciones que aún hoy indignan y llaman la atención.
Después fue su ministro político en la primera gobernación de cabeza socialista y sumiso cuerpo radical. En la continuidad fue el candidato a gobernador que decidió Binner, por tal razón, triunfando con votos radicales del norte santafesino frente al Midachi (confirmo: con votos norteños, radicales, fue gobernador) en los años en que se escribió el libro "Los Monos".
Su vida política continuó como presidente de la Cámara de Diputados, cuando Lifschitz fue gobernador después de un conteo y reconteo de votos que sigue siendo misterioso, que concluyó abruptamente con menos de 1.500 votos a favor del tercer gobernador socialista con votos radicales y el agregado de votos absolutamente de derecha, como el agonizante PDP (Lifschitz le ganó por esos 1.400 votos misteriosos al mismo Midachi)
Esta recorrida mínima y rápida de sus vidas políticas pone a Bonfatti en este punto: en la edición papel de La Capital de Rosario dice que el Senado provincial lo extorsionó cuando fue gobernador.
En esa elección la Cámara de Diputados tenía mayoría peronista, fue muy visible el triunfo de la arquitecta Bielsa como primerísima figura. Renunció y el cargo de presidente de la cámara estuvo en manos de Luis Rubeo, peronista y de buen trato con Bonfatti. Repito: muy buen trato. El Senado tuvo y todavía tiene mayoría peronista. No hubo rechazo de leyes a Bonfatti. Repito, no hubo rechazo de proyectos provenientes del Ejecutivo provincial. Puede dar fe el hombre que recondujo al radicalismo a una posición de triunfo: el senador Felipe Michlig. Estuvo y está, vaya si está.
El senador provincial en el período sobre el que Bonfattti denuncia extorsión, el senador por el departamento Rosario, tiene nombre y apellido: Roberto Miguel Lifschitz. Lástima grande, no puede certificar la denuncia pública de Bonfatti.