Es un anhelo mayoritario de los rafaelinos: que el 24 de octubre, fecha del santo patrono, sea declarado oficialmente como feriado local, como tienen las grandes ciudades y los pueblos de Argentina. Se necesita una ley provincial para lograrlo.
El 24 de octubre pasado se celebraron 143 años de la fundación-formación de Rafaela, con la presencia de los Granaderos. Para los creyentes católicos es el día del santo patrono, San Rafael. Sin embargo, todavía no se concretó un anhelo mayoritario de los rafaelinos: que este día sea feriado, como tienen las grandes ciudades y los pueblos de la Argentina.
Rafaela tiene un crecimiento población vertiginoso: 101.733 habitantes, según el censo de 2022.
Es increíble que todavía en 2024 esté en discusión este tema. En esta ocasión tocó un jueves, día laborable, y el feriado fue a medias porque es nula la actividad en la administración pública en los tres niveles, el sector bancario y el nivel educativo, pero para el comercio y la industria es un día laborable más.
¿Qué dice la normativa vigente?
El 28 de mayo de 1979, el entonces gobernador de facto de la provincia de Santa Fe, Jorge Desimoni, firmó el decreto 1435, donde declaraba "día no laborable con carácter permanente para cada localidad de la provincia el día de su santo patrono". Pero el artículo segundo es contradictorio, afirmando que "los días no laborables que se establezcan precedentemente serán, sin excepción, optativos para el comercio, la industria y la banca". Ciertamente, es necesario que haya una ley provincial que disponga el feriado como tal, según las distintas fuentes consultadas.
¿Qué esperan para presentar un proyecto sobre el feriado en la Legislatura?
La mayor responsabilidad le cabe a la dirigencia política local a nivel provincial, especialmente el senador Alcides Calvo y los diputados Omar Perotti, Marcos Corach, Juan Argañaraz y Gisel Mahmud, para presentar un proyecto en la Legislatura de la provincia y convencer a sus pares sobre la necesidad de aprobar una norma en ese sentido. El flamante presidente del CCIRR, Gabriel Corrado, expresó que podría haber ambiente propicio, en principio, sin perjuicio de que institucionalmente el tema no ha sido debatido o resuelto.
¿Tan difícil es concretarlo?
También se puede hacer una movida ciudadana de participación popular juntando firmas. Si alguna vez se logra ese objetivo será la oportunidad para rendir tributo al santo patrono para los que somos creyentes y a los antepasados que cimentaron la colonia desde 1881, como así también un día de descanso para reflexionar sobre los problemas y desafíos de la ciudad, de recreación familiar tan necesaria en estos tiempos y la posibilidad de participar en actividades oficiales, culturales y religiosas.
Al mismo tiempo, hay que hacer una memoria agradecida al fundador alemán Guillermo Lehmann con la empresa colonizadora, a los primeros formadores de Rafaela que fueron italianos de la Región del Piemonte y a los forjadores y ciudadanos de a pie que cimentaron las bases del actual presente de la Perla del Oeste. Durante la homilía de la misa en honor al patrono San Rafael en la Catedral, el obispo diocesano Pedro Torres expresó: "Quiera el Señor concedernos hoy un corazón agradecido porque él entró en esta ciudad antes que se fundara, la sigue atravesando con su presencia y sigue pasando. El día de hoy es un canto de agradecimiento a los que nos precedieron".
Repensar la ciudad
Luego de treinta y dos años del peronismo en el poder (con sus luces y sus sombras), el 10 de diciembre de 2023 asumió la oposición. Es algo que hace bien y es sano para la alternancia en la democracia, aunque a las actuales autoridades les cuesta hacer pie en la gestión, imponiendo aumentos desmedidos que han llegado a más del 300% desde que asumieron, cuando la inflación fue del 107% en los primeros diez meses de este año. ¿Cómo impactarán los incrementos de los tributos municipales en las elecciones de 2025?
En este contexto, hablando de repensar la Rafaela actual y la del futuro, los reclamos más importantes de la gente son, entre tantos otros: combatir la inseguridad, el consumo de drogas que afecta especialmente a los más jóvenes, el desempleo y la pobreza; mejorar el tránsito caótico y el servicio de minibuses; concretar más sendas peatonales y playas de estacionamiento; continuar la obra de la autopista de la ruta Nº 34 en el sector Rafaela-Sunchales; lograr el retorno de los vuelos aéreos a Buenos Aires; extender el gas natural; construir un centro de radioterapia; crear el Tribunal de Cuentas para controlar al Ejecutivo; descentralizar el Estado municipal y eliminar las bombas de estruendo.
A decir verdad, desde hace años no hay una planificación prospectiva de la dirigencia, sobre todo de la política, en la gestión a largo plazo porque Rafaela está creciendo vertiginosamente en lo poblacional, a pasos agigantados (según el censo de 2022 tiene 101.733 habitantes). Y lo más grave es que no para de crecer. ¿Entonces, están las autoridades ejecutivas y legislativas, la dirigencia en su conjunto, a la altura de las circunstancias? ¿O seguirán anclados en el cortoplacismo coyuntural?