La vivencia y detección de semejantes amenazas, pueden provocar un permanente “modo supervivencia” en el cerebro de un niño maltratado, por muchos años de su vida.
La vivencia y detección de semejantes amenazas, pueden provocar un permanente “modo supervivencia” en el cerebro de un niño maltratado, por muchos años de su vida.
El cerebro lejos de ser fijo e inmutable, es moldeado permanentemente a cualquier edad. Pero es durante estos primeros años de vida, que es es más sensible y receptivo al exterior. Las redes neuronales llegan a ver el mundo solo como un lugar peligroso, aún si ya no hay violencia presente. Como respuesta prevalecerán las conductas impulsivas, agresivas y reacciones más primitivas.
El maltrato infantil provoca graves secuelas neurobiológicas en los menores que lo padecen, pero es importante resaltar el papel de las diferencias individuales y de la resiliencia. No todos los sujetos que han sufrido abusos o abandono en la niñez, van a presentar psicopatologías o déficits funcionales per se.
Cuanto mayor intensidad y duración del maltrato, mayor probabilidad de que desencadene o predisponga a trastornos psiquiátricos como depresión, ansiedad crónica, trastorno bipolar y abuso de drogas. También afecta cualquiera de las funciones cognitivas, como el lenguaje o el razonamiento.
Los cambios estructurales llegan a ser tan evidentes, que con una simple imagen del cerebro, se puede observar la disminución del volumen en determinados casos.Entre las redes cerebrales con mayor modificación, se encuentran las involucradas en la regulación de emociones, la capacidad de alerta y de la memoria: la corteza prefrontal, la amígdala y el hipocampo, respectivamente. Así lo informan numerosos estudios, al comparar imágenes cerebrales con niños de la misma edad, que crecen en un ambiente favorable.
La huella del maltrato genera además, una desregulación en la liberación de adrenérgicos y corticoides, frente al estrés. Con el correr de los años, aumenta en gran medida la probabilidad de enfermedad cardíaca, ACV y enfermedades autoinmunes, entre otras comorbilidades.