Por Augusto Munaro
Por Augusto Munaro
"Melodía singular" (*), el séptimo libro de poemas de Paula Einöder, continúa ahondando un camino singular en relación con la palabra. En esta nueva entrega, la poeta uruguaya desea morder el verso, hacerse de su magia, absorber su poder proteico para así tornarse inspiración. El resultado es admirable por varios motivos. El primero, es el más evidente. Detrás de ese deseo afiebrado, late un sutil sentimiento de resignada frustración, pues su programa en parte intenta lo imposible, apresar el poema ideal, aquel "exquisito instante". Pero logra algo mejor, dejarnos con las ganas de esa conquista, llevando al lector a la zona activa y rizomática de la imaginación, allí donde rige lo imposible.
La segunda proeza consiste en su modus operandi, su decir siempre ajusta un entramado de imágenes y de símbolos, que por momentos nos recuerda al panteísmo lírico de hondo vuelo de Whitman, aunque algo trastocado, donde el poema tiene varios surcos / madurez del fruto / poesía en su jugo / sinfonía de verde. Canto que enuncia, sea a Virginia Woolf, o se piensa cubierta de nenúfares, en el eterno y gélido lago, boyando, como el cadáver de Ophelia; imágenes que se cristalizan en la vena del tiempo, y que conforman una línea de fuga en sí misma.
Su "hipotético", bien puede oficiar de ars poética: si el verso es el / barco / el poema es la travesía // si el verso es la / vela / el poema es el viento // si el verso es el / agua / el poema es el fluir. Un viaje de ida, pero sin costa que divisar. Porque lo que importa para Einöder, es el viaje. A diferencia del gran Gilberto Owen, quien soñaba vivir sin timón y en delirio, aquí, la voz de apertura yace atenta al momento áureo, busca las frases, las conexiones, siente los ritmos, pero no los explicita. Respeta la distancia. Navegamos las olas de la emoción, pero no nos ahogamos en ellas. Se entrevén. "Melodía singular" habla sobre el brote poético, dijimos, sobre esa práctica feliz, pero no la banaliza en descripción; su voz crece en poemas elípticos como el follaje de árboles humedecidos por la tormenta de los sentimientos. Los versos, finalmente, se tejen, porque la poesía / es una osamenta / las palabras son fibras / los árboles son palabras / los ríos son poemas. "Zonas dolientes" y la más extensa del conjunto, "Tripas y entuertos", son piezas que arriesgan otro tono, uno más intimista y acaso, por ello mismo, ligeramente convencional.
Paula Einöder. nacida en Montevideo en 1974, es poeta y licenciada en Letras. Ha publicado "La escritura de arcilla" (2002), "Miranda o el lugar desde donde no se habla" (2004), "Opacidad" (2010), "Árbol de arco" (baladas, 2020), "Para bálsamo de ruiseñores" (2021) y "Transfiguraciones", antología poética 2002-2021 (2022). "Melodía singular" obtuvo una mención en los Premios Onetti de Literatura 2020 y lleva un lúcido posfacio firmado por el poeta William Johnston.
(*) Publicado por Editorial La Coqueta. Montevideo, Uruguay, año 2023 (64 páginas).