Lunes 20.6.2022
/Última actualización 15:07
La Reforma de la Constitución Provincial (1960/62) concluida con los milicos en los pasillos, necesita reformarse, reformularse, para un mundo que es otro, una provincia diferente y, claro, necesidades absolutamente distintas. Perdón, ¿los políticos advierten que estamos en 2022, después de La Peste que quitó la sábana y el mundo, el país, la región y que, por lo tanto, nosotros somos otros? ¿Hasta dónde ven los políticos en actividad y gestión?
Soy periodista, no soy abogado ni especialista en constituciones, mucho menos funcionario para una reforma constitucional (el socialismo creó ese cargo con la inutilidad que los años han demostrado… y sin que nadie se ponga colorado). La principal objeción era, ahora se advierte, que fue una excusa -una impiadosa mentira-, que incluía la cláusula de reelección del gobernador. Se repite, esa era la objeción. Es expresa, pública y enfática la declaración de Perotti. No, no y no. Tiró una falta envido sobre la mesa. Que, si aparece, sea a partir de 2027.
Hay nueve proyectos (algunos dicen ocho, otros siete); se sostiene el estado parlamentario, o su caída, pero hay muchos. Ni pocos ni demasiados. Es obvio que deberían juntarse. Hay muchachos, el socialismo es especialista en fabricar muchachos sin liderazgo (muerto Binner - la estampita – y muerto Lifschitz, el duro ingeniero que los juntaba), que hablan de la reforma como si fuese un tema, perdón: el tema. No es así. Los deja "en orsai" que Perotti no presentó proyecto. No pueden atacarlo.
El "no" de los senadores
Cada senador es un territorio. Debe entenderse así porque así es: cada senador, un territorio, un departamento que recorren y sostienen con mano de fierro. El entramado que cada uno de ellos ha tejido es grande, difícil de calcular, pero claramente se advierte: son feudos que administran muy bien, bien o regular. No hay uno malo porque perdería su sitio. Son 19. Ni uno más, ni uno menos.
Ningún senador que se precie quiere la reforma. Si aparece la fuerza de diputados diciendo que sí, que la quieren (los "reformistas" necesitan sus votos y no los tienen), exigirían estar en la lista para que sus votos pesen en el conjunto provincial. La alternancia, el límite de mandatos (hablan de dos seguidos y chau), le quita sustento a cualquier seducción reformista. El "No" de los senadores es visible, audible, imposible de ocultar. No y está claro: "no es no".
El "no" de los diputados
Más allá de la oscuridad que da "el FUCO", que nadie sabe de cuánto, a cuántos y por cuánto tiempo se repartiría entre pocos un negro dinero (menos averigua Dios…), dinerillos entre algunos de los diputados agraciados, los diputados conforman un eje domiciliario descompensado.
Rosario y Santa Fe son mayoritarios. No es mixta la Cámara (territoriales y por voto) por tanto es el capricho de cada partido o de cada Lícita Asociación de Partidos para conformar frentes y/o alianzas. No estaría balanceada una reforma que no tenga voto territorial.
Las alianzas definen las candidaturas. El juego mujer/varón/mujer/varón lleva a un embotellamiento. Hablan para la tribuna. Conozco más de uno que se recortó el pelo, contrató asesor de imagen y se lanzó al ruedo. Plata hay. Votos, veremos. Para los diputados provinciales la reforma es un tema, de ningún modo una cuestión resuelta ni pactada con la gente de sus propios partidos y alianzas en el Senado. Un tema mediático.
El "no" de los referentes
Es imposible pensar que Agustín Rossi, María Eugenia Bielsa, Mario Barletta, José Corral, Marcos Cleri, Angelini, Bonfatti, hasta los miembros de la Corte Nacional no quieran estar. Quieren y pueden. No es sencillo que aparezcan todos… y todos en un lugar expectable, esto es: con expectativas de salir.
Ejemplo ideal: Horacio Rosatti, constituyente de la reforma de 1994. No lo he consultado pero… ¿si quisiese estar? Los referentes ven en esto dos cuestiones. La mediática, por la que sus nombres aparecen, la fatal: ¿y si no son electos? Los Constituyentes son 69. Por sumar 50 diputados y 19 senadores. No se achica ni se agranda. Concluyen con una pregunta: ¿estás seguro que hace falta?
Más referentes que no se pueden ocultar
Si de asegurar nombres se trata, Jatón es intendente de Santa Fe, Javkin de Rosario, Carolina Losada y Scarpin, junto a Lewandowsky, novísimos y votadísimos senadores nacionales e intendentes. Perotti no estaría. Alejandra Rodenas no estaría.
Roberto Mirabella no estaría. Pullaro no estaría… no estarían… vamos… con ellos hay votos, años de "imagen conocida" y además peso específico. Felipe Michlig… Armando Traferri… ¿Qué hacen con la viuda de Lifschitz? ¿Qué hacen con Mónica Fein? Cuidado, es la titular nacional de los restos humeantes del socialismo.
Si el Midachi quiere volver… María Eugenia Schmuck es la espada de Javkin… Los rectores de UNR y UNL… ¿Afuera? Hay un exceso de puntos suspensivos que son eso, suspensos, dudas.
Leyes y decretos
La transferencia de fondos, la policía municipal, la independencia de los impuestos, la duración de mandatos de Presidentes Comunales, todo es "pactable" y posible por ley. No es posible quitar el sistema 28 diputados al que gana y 22 a todos los que pierden. Está mal, pero es así desde 1962.
Tampoco es posible "El senador suplente" y "Mitad de senadores mujeres". Sin sonrisas por favor. Es todo un tema. La regulación de fueros y que Tribunales pueda citar a los senadores, otro tema; un recontra re temón, con antecedentes fresquitos, fresquitos ¿Puse "temón"? Podría haber puesto "temor" y era más fácil de entender… ¡Ja, ja! La "unicameralidad" es una muy mala palabra. La territorialidad un ensueño malsano.
Pedido demasiado inocente
Estoy en condiciones de pedir algo catastrófico. Que el cargo de convencional constituyente sea ad honorem, sin sueldo ni viáticos especiales (solo pensión completa). Agregado: que se realice en una ciudad que no sea Rosario o Santa Fe. Durante noventa días, con extensión de treinta (sobre esto tengo información confidencial que dice: el que debe decidir aprueba y sonríe). ¿Se entiende por qué la reforma constitucional está más muerta que viva…?
No es mixta la Cámara (territoriales y por voto) por tanto es el capricho de cada partido o de cada Lícita Asociación de Partidos para conformar frentes y/o alianzas. No estaría balanceada una reforma que no tenga voto territorial.
Las alianzas definen las candidaturas. El juego mujer/varón lleva a un embotellamiento. Hablan para la tribuna. Conozco más de uno que se recortó el pelo, contrató asesor de imagen y se lanzó al ruedo. Plata hay. Votos, veremos.
La transferencia de fondos, la policía municipal, la independencia de los impuestos, la duración de mandatos de Presidentes Comunales, todo es "pactable" y posible por ley. No es posible quitar el sistema 28 diputados al que gana y 22 a todos los que pierden. Está mal, pero es así desde 1962.