Domingo 26.5.2024
/Última actualización 13:47
La falta de federalismo en Argentina, las desigualdades en la asignación de los fondos coparticipables y en el esquema de subsidios a provincias, donde Santa Fe se ve perjudicada al recibir menos de lo que aporta, son prácticas que el actual Gobierno Nacional ha heredado de sus antecesores. Sin embargo, estas situaciones no sólo se han profundizado sino que se han agravado por otros condicionantes.
En pos de una supuesta reconstrucción de la autoridad, una primacía de la austeridad y una falta de creencia en el Estado como un actor social que debe intervenir en la vida democrática, así como un ensayo de respuesta al último gobierno kirchnerista, que llevó al país a una crisis profunda en materia económica, social, productiva y ética, se atacan derechos como la educación pública y el transporte público para Santa Fe y gran parte del interior del país y se paralizan y suspenden obras nacionales en nuestra ciudad.
Santa Fe atraviesa una crisis con el transporte público. Pareciera que nos quieren hacer sentir a los santafesinos como ciudadanos de segunda. El esfuerzo de quienes vivimos en esta provincia tiene que valer y es esa la defensa de Santa Fe que lleva adelante el gobernador Maximiliano Pullaro, que apoyamos fuertemente desde Unidos para Cambiar Santa Fe, a la cual también se suman otros gobernadores y el intendente Juan Pablo Poletti.
Las decisiones unilaterales y que privilegian al AMBA, generan un clima de incertidumbre y desconfianza para el interior, alimentando un sentimiento de abandono por parte de las autoridades centrales, con una disminución del 89.5% de las transferencias no automáticas a las provincias. En cuanto a la desfinanciación de las Universidades Nacionales, luego de la masiva marcha del pasado 23 de abril en Santa Fe y muchas ciudades del país, solo se anunció un incremento a la Universidad de Buenos Aires del 270%, mientras persiste el recorte del FONID, que podría cubrir el 15% de los salarios del sector docente.
Por su parte, la quita del apoyo del Estado Nacional al sistema de transporte público, con el retiro del Fondo Compensador del Transporte Público para el Interior, lo pone en jaque y obliga a que cada mes haya especulación sobre el pago los sueldos, sobre el aumento del monto del boleto de transporte, mientras que son menos las personas usuarias del sistema por las múltiples dificultades. En concreto, los santafesinos aportamos a Nación unos 28.000 millones de pesos del Impuesto a los Combustibles en el primer cuatrimestre del 2024 y no ha vuelto absolutamente nada.
Los santafesinos tenemos en Pullaro a un gobernador oriundo del interior de nuestra provincia, en el marco de una construcción política como la alianza de gobierno de Unidos Para Cambiar Santa Fe, lo que nos permite no resignarnos. No solo para reclamar lo que nos corresponde a los santafesinos ante Nación, sino para creer en el camino que el gobierno provincial emprendió para fortalecer la producción y la seguridad. Para trabajar contra las mafias y el delito a través de una política de seguridad amparada en un paquete de leyes aprobadas por las dos cámaras de nuestra Legislatura Provincial y que ya tiene sus frutos en nuestra ciudad capital.
Santa Fe puede ser el motor productivo del país y es fundamental que estos esfuerzos sean acompañados por el gobierno nacional que debe reconsiderar su enfoque hacia las provincias, reconsiderando el esquema de coparticipación nacional, reconociendo la diversidad de realidades y necesidades que existen en el país. Solo así se podrá superar la desigualdad, dejar de priorizar las necesidades de una provincia o región sobre las de otras y construir un futuro más justo y próspero para todos los argentinos.