UN LECTOR
"Por favor, publiquen algo sobre las dificultades para llevar a cabo la Verificación policial de los vehículos en Santa Fe. Es un requisito para realizar una transferencia y están dando turnos para dentro de un mes. Es una vergüenza: están trabando las ventas de todos los vehículos usados. Y ni hablar del costo de todo el trámite de transferencia".
GRACIELA BRENGIO
"¿No existe Arbolado Público en la Municipalidad de Santa Fe? Desde mayo de este año vengo reiterando día por medio el reclamo Nº 39.327 para la extracción de un árbol seco y la posterior colocación de otro, en la vereda de mi vivienda. Infructuosamente, llamo al teléfono que me indicaron de Arbolado Público de la Municipalidad. Nunca atienden. Mi duda: ¿es una de las tantas oficinas que no existen más en la nueva gestión?".
PEDRO
"Quiero que el Sindicato Asoem explique por qué no liquidan el 13 % que corresponde al mes de octubre, que consiguió Festram, siendo que según el secretario J. R. Medina, en la última paritaria, el aumento pactado con los diferentes Departamentos Ejecutivos en las Mesas Paritarias locales sería abonado en tres tramos: 8 % en agosto (retroactivo), 5 % en septiembre, 4 % en octubre. Pido que aclaren por qué no liquidan el 9 % faltante".
ANTONIO
"Intendente Poletti: los inspectores municipales ¿no ven la realidad de la ciudad? Paso a enumerar dos peligros latentes: el estado de las veredas es deplorable y esto no es novedad para nadie. Y empezando por la zona céntrica, a dos cuadras de su cómodo sillón. Como por ejemplo Primera Junta y San Jerónimo, la vereda de una playa de estacionamiento; en la seccional Primera de policía, Primera Junta y 25 de Mayo; las del Registro Civil, frente a la plaza España. Antes había inspectores barriales que sancionaban y se intimaba a los propietarios. Otra cosa: en los operativos de tránsito, ¿no ven la cantidad de tuertos, de coches ciegos, de motos y bicicletas sin luces ni ojos de gato, del ruido que hacen los caños de escape? ¿No conocen las normativas de tránsito? Así como le digo de las veredas, etc., etc. ¡¡todo es así!! En el barrio Acería, directamente no existen las veredas".
ING. CÉSAR WAISMAN
Los Vecinos Autoconvocados del barrio Candioti Norte se reunieron para manifestar su apoyo a la nota elevada por la Vecinal 7 Jefes en el mes de octubre de 2021 y publicada en diario El Litoral, acerca del proyecto de parquización de los terrenos ferroviarios, ubicados detrás de la Estación Belgrano y lindantes a las calles Vélez Sarsfield y Avellaneda. En ese sentido manifestaron la coincidencia absoluta con los fundamentos elevados por la Vecinal 7 Jefes en todos sus términos, con referencia al uso del espacio público y la creación de un "pulmón verde", que incremente la calidad de vida de la ciudad y que sirva además como un punto de atracción para el turismo y los vecinos de todos los barrios.
Como ejemplo cabe mencionar que en el año 1874, el presidente Domingo Faustino Sarmiento creó el Parque 3 de Febrero, hoy Parque de Palermo, tomando las experiencias existentes en Norteamérica y Europa: de dotar a la ciudad de un pulmón verde para las generaciones futuras y pensando en la gran ciudad que luego sería Buenos Aires. Posteriormente, dichos terrenos (370 hectáreas) pasaron a manos de la Municipalidad de Buenos Aires, la cual avanzó en los proyectos del Planetario, el Jardín Zoológico, el Jardín Botánico y la Sociedad Rural y en la diagramación y forestación del parque, para lo cual fue contratado en 1888 el paisajista francés Charles Thays, quien por concurso público fue el responsable de diseñar las sucesivas, exitosas y bellísimas expansiones del parque. Cien años después, la afluencia a dicho parque se vio incrementada notablemente, en especial los fines de semana, con familias que lo transitan a pie o en bicicleta, disfrutando de este corazón verde de la ciudad, así como de los mejores lugares para visitas recreativas y educativas. Ya en ese momento, estos terrenos, que eran campos llanos, fueron pensados por auténticos visionarios a los que hoy agradecemos, pensando en el crecimiento de una gran ciudad y con miras al bienestar de las generaciones futuras.
Lo mismo podría aplicarse a los terrenos del Ferrocarril Manuel Belgrano, evitando una mirada próxima y coyuntural a su destino, dando participación a gente idónea con trayectoria y especializada en urbanizaciones y parquizaciones, para que esta planificación no quede en manos de improvisados y gente no formada para la toma de este tipo de decisiones; concretamente, gente que ocupa cargos públicos o políticos con un desconocimiento total de la materia y con intereses mezquinos partidarios.
Traemos la referencia a los Parques de Palermo, porque la lógica de su creación hace 140 años, cuando el terreno era campo, debiera inspirar y constituirse en el mecanismo a emplear para pensar el destino futuro del Parque de la Estación Belgrano y salvaguardar las condiciones para que cada metro cuadrado no se destine a otro fin, evitando por todos los medios posibles el desguace de su extensión en parcelas, apelando a necesidades inmediatas. En este sentido, ejemplos de decisiones mal tomadas por la política, o por personas que no están formadas o capacitadas, hemos podido ver recientemente en esta ciudad, con resultados negativos.
Según el informe de INTEGRAR, en la ciudad de Santa Fe, teniendo en cuenta la población censada en 2010, hay 4,86 m2 por habitante de espacios verdes diseñados, como plazas y parques. La ciudad de Bs. As., en el 2018, reportó 6 m2 por hab., mientras que algunas recomendaciones internacionales sugieren al menos 10 m2 por hab.
Es muy difícil, por no decir imposible, que exista otra oportunidad donde nuestra ciudad pueda contar con un espacio de 24 hectáreas juntas, que posibiliten la realización de un proyecto tan importante y de tanta jerarquía que la enaltecería, junto con el realce del paisajismo de nuestros barrios y elevaría, sin lugar a dudas, la calidad de vida de todos los vecinos de la ciudad. Resaltamos el hecho de que al ser 24 hectáreas juntas, la decisión de su uso no puede tener el mismo criterio que si se tratara de ½ , 1 , 3 o 7 hectáreas, y es en este punto donde radica la mayor importancia de esta propuesta.
Este grupo de vecinos está muy atento a las decisiones, criterios e intencionalidades de aquellos que tienen el poder momentáneo de tomarlas y espera que el modelo del visionario presidente Sarmiento sea un modelo a seguir.
MATÍAS ROSSI
La manzana de la ciudad de Buenos Aires en la que se encuentra el Congreso Nacional se convirtió, con el transcurso del tiempo, en una isla autónoma del Estado, a pesar de albergar a una de las instituciones esenciales de la democracia. Esto viene a cuento porque trabajan en ella, según datos de su página web a septiembre de este año, nada menos que 4.295 empleados para los 72 senadores, más 4.551 que sirven a los 257 diputados nacionales. Un absurdo mantenido por décadas y que convierte a ese lugar en un pésimo ejemplo de burocracia estatal. En el Senado, los asesores, nombrados por los legisladores, más los asignados a los bloques partidarios llegan a casi 1.700 y son en muchos casos verdaderas Pymes familiares.
A la cabeza de este abuso político, los senadores Rodas y Pilatti Vergara del Chaco suman 71 a su cargo, Carolina Moisés de Jujuy 40, Montenegro de Santiago del Estero y Rajal de La Rioja, 34 cada uno y Mayans de Formosa 31, todos ellos de la UP. Ninguna democracia respetable del mundo permite este atropello a la confianza de sus ciudadanos. Por citar España con casi los mismos habitantes que la Argentina, posee según el sitio web 266 senadores y 350 diputados, es decir 287 legisladores más que los nuestros pero solo los atienden 1.547 empleados, menos de 3 para cada uno y su costo representa el 45 % del argentino.
A este disparate, a contramano de la realidad que existe puertas afuera del Congreso, lo pagamos todos y por eso es hora de exigir que esta isla de la fantasía y derroche racionalice su desmesurada estructura, que insulta el sacrificio del pueblo para quien trabaja.