Por Roberto Casabianca
Por Roberto Casabianca
El compromiso es la respuesta valiente de quienes no quieren malgastar su vida, sino que desean ser protagonistas de la historia personal y social.
Juan Pablo II
Otro escándalo sacude a la OMS, ya que su director, Tedros Adhanom Ghebreyesus, declaró el 23 de julio pasado que la viruela del mono (o poxvirus) constituye una Emergencia Internacional de Salud Pública, proponiendo, entre otras cosas, la vacunación contra la viruela humana, que al parecer confiere cierta inmunidad cruzada sobre el poxvirus. A esta decisión, el director la tomó a pesar del criterio desfavorable del comité asesor que la votó en contra.
¿Volveremos a vivir la exageración grotesca generada para el Covid, que logró una histeria colectiva dirigiendo a la población hacia la vacunación masiva en beneficio desmedido de las grandes farmacéuticas?
La doctora Karina Acevedo, de sobrados antecedentes en todo el mundo, ha publicado consideraciones muy importantes sobre esta declaración de la OMS. Acevedo es doctora en Ecología Molecular en la Universidad de Cambridge y tiene una maestría en Ecología Marina en el Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada (México), también conocido como el Cicese, una institución de referencia en el contexto nacional e internacional que, a través de su excelencia académica apoya el desarrollo nacional y la formación de recursos humanos.
Asimismo, Acevedo es licenciada en Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Nacional de México y profesora investigadora de tiempo completo, habiendo publicado consideraciones muy importantes sobre la declaración de emergencia internacional de la OMS.Y participó, además, junto con un grupo de especialistas, en la elaboración de la "Guía rápida para la identificación de lesiones típicas provocadas por la zoonosis del poxvirus de los monos y otras lesiones vesiculo-posturales".
El material fue realizado en base a la información científica y evidencias clínicas públicamente disponibles al 3 de junio de 2022 como lo manifiesta. El poxvirus no es nuevo, fue detectado hace décadas; no infecta fácilmente a los humanos desde los hospedadores comunes (monos y fundamentalmente roedores) y más difícilmente se produce el contagio entre los humanos, quedando casi limitado a los varones homosexuales por lo que, algunos países aconsejan a estos no multiplicar sus parejas.
De un total de 528 casos detectados entre enero y junio de 2022, 98% de los mismos correspondían a varones homosexuales o bisexuales, 41% tenían HIV-SIDA, con una media de edad de 38 años, habiéndose transmitidos por vía sexual y no se produjo ninguna muerte.
Por otro lado si se produce la infección, evitando las secundarias por bacterias en las vesículas que forma, no deja secuelas. ¿Se justificaría entonces como lo propone el director de la OMS la vacunación contra la viruela humana, la que está elaborada en base a un virus diferente que otorgaría cierta inmunidad cruzada?.
Veamos entonces las dificultades de este procedimiento. A partir de un exceso de reportes de casos de "culebrilla", sinónimo de herpes zoster, posteriores a la inoculación de ARNm contra el Covid-19, se ha considerado a esta enfermedad como uno de los efectos secundarios que puede darse debido a que se produciría una inmunosupresión causada por la mal llamada vacuna del Covid.
Recordemos la vacuna contra la varicela contienen el virus vivo debilitado y este, al igual que en los individuos que han padecido varicela, puede ingresar a nuestro organismo y permanecer latente en los ganglios neurales y reactivarse dando lugar al molesto y veces grave herpes zoster.
Pese a que la reactivación del virus de la varicela zoster, sigue planteando interrogantes, en un estudio realizado por del Departamento de Biociencias Moleculares del Instituto Wenner-Gren de la Universidad de Estocolmo y del Departamento de Microbiología Clínica de la Universidad de Umeå se concluye: "Encontramos que la proteína de espiga o Skype, producida en grandes cantidades por la inyección de ARNm contra Covid inhibe notablemente la reparación del daño del ADN, que es una especie de sistema de respuesta de emergencia intracelular que repara las roturas del ADN de doble hebra".
Ningún ser humano, ni animal, ni vegetal pueden sobrevivir cuando la integridad de su código genético deja de estar protegido y no es constantemente reparado a través de múltiples mecanismos.
En una persona normal y sana, el mecanismo llamado NHEJ, repara el ADN y evita que se produzca una mutación patógena pero, en presencia de la proteína de espiga o Spike que produce la inyección de ARNm contra Covid, se inhiben dos proteínas que participan en dicha reparación con lo que, la eficacia de la NHEJ se puede suprimir hasta en un 90%, perdiendo la capacidad de hacer su trabajo normalmente.
Los datos científicos indican que la Spike afecta directamente a los dos sistemas de vigilancia del ser humano, que son el sistema inmunológico y el sistema de reparación de daños del ADN utilizados para responder a amenazas, entre ellas la del cáncer. Por este efecto se inhibe la producción de células B y células T, lo que conduce directamente a las inmunodeficiencias.
También el gobierno del Reino Unido sostiene que después de la inyección de ARNm contra Covid, se ha dañado el sistema inmunológico de tal forma que no se puede recuperar la inmunidad natural a las variantes del mismo y posiblemente a otros virus. La aparición de un número desusado de casos de herpes zoster sería una prueba de la inmunodeficiencia producida por la inyección de ARNm contra Covid.
En Cataluña, por esta razón, se aceptó una querella por haber considerado que una muerte se produjo por la viruela del mono cuando, en realidad, habría sido por herpes zoster que es el sinónimo de culebrilla. De ser así estamos en un problema pues, la vacuna contra la viruela humana que se utilizaría para contrarrestar la viruela del mono es a virus atenuados y esto no debería hacerse en personas inmunodeficientes por el riesgo que el mismo se revierta a una alta virulencia provocando la enfermedad.
La misma vacuna de la viruela humana, provoca efectos secundarios. En Estados Unidos y como consecuencia de considerarse erradicada la enfermedad, el número de vacunados es muy bajo y sin embargo el VAERS informa 5716 efectos adversos post inoculación desde el año 1990 en que se comenzaron a registrar los mismos, entre los que se mencionan cardiopatías y otros eventos cardíacos. A esto se le debe sumar la llamada mejora dependiente de anticuerpos.
Después de la invasión de un virus o una bacteria, el organismo desarrolla una respuesta inmunitaria específica para el patógeno de la cual participan los anticuerpos.
Cuando todo funciona bien estos anticuerpos, que son proteínas, se adhieren a los invasores y los eliminan del cuerpo. Sin embargo existen algunos patógenos que consiguen neutralizar este efecto de defensa y utilizan a los propios anticuerpos para ingresar a las células del huésped, con lo cual se agrava la enfermedad. Esto se llama mejora dependiente de anticuerpos (ADE).
El ADE es un riesgo real para las inyecciones de ARNm contra Covid y hoy sabemos que las personas que las reciben, se infectan nuevamente por el virus del Covid ya que los anticuerpos que generan no son esterilizantes ni neutralizantes.
Recientemente The Lancet publicó un estudio sobre la eficacia de las inyecciones de ARNm contra Covid y la disminución de la respuesta inmunológica concluyendo que esta disminuye con el tiempo haciéndose menor que la de los individuos no vacunados.
Lo expuesto muestra la inutilidad de la OMS al proponer esta vacunación ya que en lugar de velar por el bienestar de la población vela por los intereses de sus financiadores.