La disciplina crece a pasos agigantados y Santa Fe no es la excepción. El domingo fue un día para celebrar: se realizó un encuentro de diversos clubes para las categorías formativas. Cintia "Pitu" Giustini, una de las referentes del fútbol femenino en la ciudad, charló con Pasión Liga para explicar en qué consiste este espacio destinado a las más pequeñas.
El crecimiento del fútbol femenino a nivel mundial resulta notorio. Los típicos picaditos que se ven en las plazas, escuelas y canchitas barriales, ya no son solo un privilegio de hombres. Cada vez más niñas y adolescentes se suman y también lo hacen muchas adultas que años atrás no se atrevieron o no pudieron porque las tareas diarias con las que cargan no siempre les permiten tener tiempo para realizar ejercicios físicos y recreativos.
A veces cuando se refiere a esta disciplina, se suele referir únicamente a las jugadoras. Sin embargo, el análisis debe ser más integral: hay entrenadoras, ayudantes, árbitras, dirigentes y periodistas que acompañan constantemente su crecimiento. Desde el 2012 que en la Liga Santafesina es oficial la competencia femenina, y una de las banderas en este sentido es Cintia Giustini, más conocida como "Pitu". El Litoral habló con la ex jugadora de Unión, quien hoy se dedica a formar jugadoras desde temprana edad en la ciudad de Recreo y donde llevarán a cabo encuentros de escuelitas.
-¿De qué se trata esta idea, Pitu?
-Esto es un proyecto particular que venimos llevando adelante junto a Natalia Reynoso y Maximiliano Luna. Es una escuelita de formación en fútbol femenino, con la cual comenzamos hace 2 años con las nenas, y hoy tenemos veinte a cargo. Somos un grupo importante, trabajamos de muy buena manera. Ahora ya llevamos a cabo, con éxito, un primer encuentro para que las nenas puedan disfrutar de jugar y de tratar de plasmar lo que aprenden en las clases. El mismo fue el domingo en el Complejo La Caprichosa, en la ciudad de Recreo (Gdor Freyre, Javier de la Rosa y, S3018 Recreo).
El juego. Pura pasión. Cada niña disfrutó de un domingo diferente y en familia.
-¿Cómo fue la organización?
-Muy buena. El torneo se dividió por edades, en este caso 6 a 13 años. Afortunadamente contamos con 5 canchas en el predio, porque se sumaron varias escuelitas. Así que para que puedan tener la posibilidad de disputar varios partidos fuimos armando estas canchas por categoría. Fue un gran número de nenas entre clubes y escuelitas formativas de 16 instituciones. También fue muy importante la concurrencia de público que disfrutó de un día maravilloso.
-Antes eras jugadora, ahora te toca un rol formativo, ¿cómo lo analizás?
-Sí, y la verdad que me sienta muy bien. Viste que en el femenino empezamos al revés (risas). Se comienza con las chicas más grandes, y ahora toca la etapa formativa. En mi caso, me siento una especie de madre porque las cuido, les hablo, juego con ellas. Incluso a veces me llevan juguetes a las prácticas para que me divierta con ellas, eso me pone contenta. El objetivo es el de enseñarles a que con la pelota pueden jugar y divertirse. Cuando yo era niña nunca tuve escuelita, no compartí mi infancia con chicas jugando al fútbol, era todo con varones. Por supuesto que sufría ese discurso de que las nenas no debían jugar al fútbol, pero sin embargo seguí adelante porque era lo que me gustaba. Hoy sigo enfocada en mis objetivos, seguir enseñando y dándole lugar al mundo de las chicas en el fútbol, para que el día de mañana puedan llegar a tener oportunidades.
-¿Entonces te parece correcto que se comience de menores a mayores?
-Claro que sí. En la Santafesina se empezó de grandes hacia abajo, y ahora estamos en esta etapa formativa. Las nenas ya saben cómo pararse en la cancha, hasta donde correr, es impresionante lo rápido que incorporan los conceptos. Tengo nenas desde los 4 años que hoy tienen 7, a quienes llevo a ver partidos de primera en el femenino. Ellas solas me dicen "yo juego en aquella zona" o cuestiones referidas al desarrollo del encuentro en sí. Escucharlas a tan corta edad y saber que entienden, ver como se reflejan en chicas grandes y que las tomen como ejemplo te llena de orgullo y satisfacción. No tengo ninguna duda de que este es el camino a seguir para que el femenino crezca como lo merece.
-¿Cómo ves el fútbol femenino en la provincia?
-Lo veo súper positivo. Muy contenta, estoy más que orgullosa de que la zona apuesta a darle su espacio y su lugar a las chicas. En Recreo, mi ciudad, son cuatro o cinco clubes que apuestan a esto. Vamos a paso lento, pero pisando bien grande. Lo que si haría falta es una especie de visoria, para que las chicas puedan llegar a otros clubes, sobre todo a Buenos Aires. Pero ya llegara, es uno de los objetivos. También el taller de entrenadoras que se está desarrollando en este último tiempo, un proyecto de Noelia Formento. Allí se dan distintas charlas, incluyendo nutricionistas y hasta cursos de RCP. Es un avance muy importante.
-Cómo ex jugadora, ¿qué nos podés contar?
-He jugado en Universidad de Almirante Brown, en Unión donde estaba "Cacho" Roteta. Después ya pasé a ser entrenadora de un selectivo de jugadoras con Elsa Oronado, fuimos a Concepción del Uruguay, a los juegos región centro. Tengo grandes recuerdos de mi etapa como jugadora, hoy estoy lejos de serlo pero me gusta ocupar el rol de enseñar.