Sábado 18.11.2023
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En la ciudad, cuando el sol se une al grito de gol de los pibes, nace un evento que se ha convertido en sinónimo de pasión: El Lagunerito. En su última edición, este torneo de fútbol infantil ha superado todas las expectativas, desafiando incluso las inclemencias del tiempo.
Jugando entre gotas: El éxito de la segunda jornada
Hugo Servín, el incansable coordinador del Lagunerito, comparte la emoción que rodea al evento: "Hoy está muy lindo, más allá de que iremos viendo el comportamiento del clima. Los chicos están felices y contentos". La segunda jornada fue un verdadero éxito, con niños de La Perla, Santa Fe FC, El Quillá y Ciclón Racing demostrando su pasión por el deporte de mayor convocatoria.
Este torneo de fútbol infantil ha superado todas las expectativas, desafiando incluso las inclemencias del tiempo. Crédito: Pablo AguirreEl Lagunerito no solo es una competición; es un sueño que se está cumpliendo para estos jóvenes deportistas. La lluvia, lejos de apagar la chispa futbolera, añade un toque de emoción a cada encuentro. El profesor Servín afirma: "Si el tiempo acompaña, seguiremos mañana, y el lunes feriado pondremos en juego las finales".
Rivales, repelente y risas: La experiencia del público
El público, armado con repelente y una dosis extra de entusiasmo, se hizo presente para disfrutar de la segunda jornada del torneo. Padres, familiares y amantes del fútbol se unieron para respaldar a los pequeños atletas, creando una atmósfera vibrante y llena de alegría.
El público se hizo presente para disfrutar de la segunda jornada del torneo. Crédito: Pablo AguirreEl Lagunerito no solo celebra el talento futbolístico, sino que también destaca la importancia del espíritu deportivo y la camaradería. La diversidad de equipos en competencia agrega un toque especial, mostrando la riqueza del fútbol infantil en la ciudad.
Desafiando al clima: ¿Qué nos depara el esto del torneo?
El clima, siempre impredecible, se convierte en un rival más en este torneo lleno de sueños. Sin embargo, la determinación de los organizadores y la pasión de los participantes apuntan a que El Lagunerito continuará desafiando al pronóstico, brindando más momentos memorables y construyendo recuerdos que perdurarán mucho más allá de las gotas de lluvia.
El Lagunerito no es solo un torneo; es una celebración de los pibes, del deporte y de la alegría compartida. En cada jugada, en cada risa y en cada gota de lluvia, se teje la historia de un evento que ha logrado convertirse en una tradición que une a la comunidad alrededor de la pasión por el fútbol.