El ex ministro de Desarrollo Social graficó su análisis señalando el hecho de que la asistencia alimentaria en comedores permanece en los mismos niveles de los dos años previos de pandemia más allá de la recuperación objetiva de la tasa de empleo.
El diputado nacional del Frente de Todos Daniel Arroyo sostuvo que la situación social es "crítica" pese a que "objetivamente" hay "más trabajo" y actividad económica, en tanto que atribuyó la crisis a la elevada inflación, que golpea en la capacidad adquisitiva y hace que "a mucha gente le cueste llegar a fin de mes".
El ex ministro de Desarrollo Social graficó su análisis señalando el hecho de que la asistencia alimentaria en comedores permanece en los mismos niveles de los dos años previos de pandemia más allá de la recuperación objetiva de la tasa de empleo.
"La situación social es crítica básicamente porque a mucha gente le cuesta llegar a fin de mes. Es evidente que hay mas trabajo, especialmente en construcción y textil, pero no baja la gente que asiste a los comedores. La gente trabaja y después pasa por los comedores a retirar los alimentos", indicó.
"Aún en un contexto de aumento de la actividad económica, el problema central es la inflación y debemos encarar un plan antiinflacionario de manera rápida", agregó.
En ese sentido, Arroyo remarcó que ese plan para poner un freno a la escalada de precios "no debe ser gradual" sino de manera veloz y efectiva, aunque alejado de las recetas de ajuste que proponen sectores de la oposición.
"Hay que hacer un plan antinflacionario de manera rápida, no de manera gradual. Si tuviéramos 8 o 10 puntos de inflación como otros países del mundo sí podría hacerse de forma gradual pero no es esa la realidad argentina", evaluó el diputado peronista.
Sobre el plan antiinflacionario, propuso una conjugación de políticas, que van desde los acuerdos de precios y salarios, pasando por la creación de mercados de cercanía directos del productor al consumidor, un programa de créditos no bancarios no mayor al 3% anual para capitalizar a los trabajadores independientes que realizan tareas por fuera del mercado registrado, y por último cuestiones macroeconómicas. .
"Todo eso integrado y junto sería un plan antiinflacionario", expresó Arroyo, autor de un proyecto de ley para crear 400 mercados de cercanía del productor al consumidor, sin intermediarios.
El ex funcionario del Gobierno de Alberto Fernández reconoció que inclusive en el segmento de trabajadores en relación de dependencia hay mucha gente que tiene complicaciones para llegar a fin de mes, situación que antes no ocurría en ese sector del trabajo formal.
"El que tiene trabajo formal en esencia es el que puede planificar. El que tiene trabajo informal integrado como el carpintero que tiene trabajo siempre y el que hace changas. Hoy las tres realidades tienen problemas", manifestó.
"Para no ser pobre en febrero una familia de cuatro personas necesitaba 90.000 pesos", alertó.