Redacción de El Litoral
Se anticipa un clima reñido también en la Cámara Alta donde, por ahora, las opiniones a favor y en contra de la despenalización están empatadas. No prosperó un pedido para que el debate sea llevado al interior del país.
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Parlamentario.com/Clarín
El Senado escuchará a más de 60 expositores -una cifra que podría duplicarse- antes de la firma del dictamen sobre la despenalización y legalización del aborto (IVE). A lo largo de todo el mes de julio, las comisiones de Salud, Justicia y Asuntos Penales y Asuntos Constitucionales verán desfilar a abogados, médicos, ex funcionarios y especialistas, que aportarán su visión sobre el texto aprobado en la Cámara de Diputados.
Las jornadas de ponencias serán siete y se llevarán adelante los martes a partir de las 14 y los miércoles desde las 10 -por el receso de invierno, la Cámara Alta no tendría previsto sesionar-. Así se definió este martes en la primera reunión plenaria, donde senadores a favor y en contra de la ley ratificaron la intención de firmar dictamen el 1º de agosto y llevarlo al recinto el 8.
La lista de expositores -que incluye 56 pero se ampliará en las próximas horas- fue confeccionada por los presidentes de las tres comisiones, Mario Fiad (Salud), Pedro Guastavino (Justicia y Asuntos Penales) y Dalmacio Mera (Asuntos Constitucionales). Si bien aún no se resolvió quiénes serán los primeros, se conoció que el ministro de Salud, Adolfo Rubinstein, concurrirá el martes 24, el mismo día que el ex titular de esa cartera Ginés González García.
Muchos de los invitados ya pasaron por la Cámara de Diputados. En contra de la ley hablará el ex convencional constituyente Eduardo Menem, y a favor argumentarán el constitucionalista Andrés Gil Domínguez, la titular de la Fundación para Estudios e Investigación de la Mujer (Feim), Mabel Bianco, y la directora del Conicet, Dora Barrancos.
También defenderán la ley, representantes de la Campaña por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito y de Amnistía Internacional; la jurista Aída Kemelmajer de Carlucci; y Pedro Cahn, de la Fundación Huésped. Y en contra se sumarán la abogada María Angélica Gelli y el constitucionalista Alberto Bianchi, entre otros.
Las exposiciones serán intercaladas, durarán siete minutos y los senadores podrán formular preguntas. Al igual que en Diputados, no hará falta reunir quórum, dado que el plenario finalizó este martes en cuarto intermedio y así se continuará hasta el miércoles 1º, fecha programada para la firma de dictámenes.
AL INTERIOR NO
El único punto de controversia, que anticipó el clima caliente que genera este tema, fue la propuesta de la misionera Magdalena Solari (Frente de la Concordia) de llevar el debate al interior, con dos o tres audiencias. Tuvo rápido apoyo de la radical riojana Inés Brizuela, y de la salteña Cristina Fiore (Pares), todas enroladas en el sector antiabortista. “El debate en Diputados ha sido rico y amplio, no hay que tomar otras medidas que dilaten. Hay indicios de que quieren dilatar”, sostuvo la rionegrina Magdalena Odarda (del partido RIO, ex Coalición Cívica-ARI).
Salió al cruce la tucumana Silvia Elías de Pérez (Cambiemos): “Nadie pide un día más de debate sino un debate federal. No se nos puede decir que queremos estirar el tiempo”, sostuvo la senadora, del grupo más notorio antiabortista.
También Miguel Pichetto, y luego Marcelo Fuentes, jefes de las bancadas del peronismo federal y de los que responden a Cristina Kirchner, se pronunciaron en contra de las audiencias. “El Senado discute siempre acá, no salió tampoco en la ley de medios, esas fueron reuniones previas al debate hechas por las organizaciones”, sostuvo Pichetto, al cruce de argumentos de la salteña Fiore.
La controversia no fue sometida a votación, y se facultó a los tres presidentes del plenario a tomar una decisión. Fiad dijo que lo harían este miércoles.
DOS POR SALUD
Como ocurrió en Diputados, donde opinaron más de 700 expositores, en el Senado las opiniones estarán balanceados mitad a favor, mitad en contra. Para el 24 de julio ya se anotaron el ministro de Salud, Adolfo Rubinstein, y el ex titular de esa cartera, Ginés González García. Ambos ya expusieron en la Cámara baja y apoyan el proyecto.
“EL ESTADO SE HACE CARGO”
El senador oficialista Federico Pinedo presentó un proyecto que apunta a poner al Estado en el medio de abortos y adopciones, con un programa que se llamaría “El Estado te acompaña y se hace cargo” y que establece que cuando una mujer comprueba que está embarazada y no quiere tener a ese hijo, se anotaría en el programa, recibiría una ayuda económica para llevar adelante el embarazo, y luego entregaría el bebé en adopción, con la posibilidad incluso de tener injerencia en el proceso de selección de los futuros padres adoptivos”. Según revelan medios porteños, el legislador -quien ya había anticipado que el proyecto de Diputados tendría modificaciones- dejó abierta la puerta a que no sea solo el Estado el que subsidie, sino que podrían ser “terceros sin identificar los que se hagan cargo del control, asistencia médica, alojamiento y alimentación de las mujeres embarazadas”.