Perotti inauguró el polideportivo en el Colegio Industrial de Venado Tuerto
Participaron del acto el gobernador Perotti, el intendente Chiarella y Silvia Villarroya, hija del Prof. César F. Villarroya, cuyo nombre se dio al flamante espacio.
Corte de cintas para dar cierre al acto inaugural del playón deportivo.
En el comienzo de sus actividades oficiales en Venado Tuerto, el gobernador Omar Perotti inauguró en la mañana de este jueves el playón polideportivo “Prof. César F. Villarroya” en la Escuela de Educación Técnico Profesional N° 483 “El Industrial”, en la esquina de España y Mitre.
En una emotiva ceremonia, de la que también participaron alumnos, egresados, directivos, cooperadores y docentes de todas las épocas, hicieron uso de la palabra el intendente Leonel Chiarella; el director del Industrial, Alejandro Baroni; y el gobernador Omar Perotti, quien estuvo acompañado por el ministro de Gestión Pública, Marcos Corach; la ministra de Salud, Sonia Martorano, y la ministra de Medio Ambiente, Erika Gonnet, entre otros funcionarios de distintos niveles de gobierno.
A pesar de la fina llovizna, el gimnasio techado permitió desarrollar la actividad con absoluta normalidad y concluyó con el descubrimiento de la placa de homenaje al profesor César Villarroya, que en el futuro quedará en el centro de un mural alusivo a sus virtudes como persona y como docente hasta su fallecimiento en un accidente. En el descubrimiento de dicha placa conmemorativa, el intendente Chiarella y el gobernador Perotti acompañaron a Silvia Villarroya, hija del homenajeado.
En el final del acto se procedió al simbólico corte de cintas con las autoridades presentes y luego llegó la inauguración deportiva, donde los alumnos del colegio y algunos funcionarios se animaron a embocar la naranja en uno de los cuatro aros profesionales dispuestos en el gimnasio.
Sentido de pertenencia
En el cierre de los discursos, el gobernador Omar Perotti recordó que, desde sus primeras visitas a Venado Tuerto, siempre que se mencionaba a la escuela técnica de España al 400, no se lo hacía ni el nombre ni por el número, sino que se la conocía como “el Industrial”. Y observó que “cuando eso ocurre, hay otra cosa, hay algo más, implica un sentido de pertenencia que genera un activo diferente, y esa trascendencia se asocia con el progreso, con las fuentes de trabajo que se generaron para muchos de los que pasaron por acá e incluso por los que, luego de haber transitado por estas aulas, supieron construir sus empresas y llevarlas adelante”.
En virtud de ese arraigo, Perotti reveló que desde el primer momento de su gobierno comprendieron que el proyecto edilicio ya iniciado debía mejorarse y completarse. “Si tanto se hizo hasta el momento en esta escuela, no me cabe duda que esta nueva etapa, con mejor infraestructura y mejor equipamiento, esto será multiplicador, ayudando al esfuerzo y el talento de los docentes para educar a los estudiantes”, auguró el mandatario rafaelino, quien renovó el compromiso de trasladar cuanto antes la subestación transformadora -hoy bajo el techo del gimnasio-, junto con el Municipio y la Cooperativa Eléctrica, sin que ello signifique un perjuicio para la provisión de energía eléctrica al vecindario.
Chiarella, Baroni y Perotti, en el descubrimiento de la placa junto a Silvia Villarroya.
“Para nosotros es hoy una alegría estar compartiendo este momento con ustedes y seguir haciendo cosas importantes para una ciudad que es generadora de empleo y, sobre todo, que es generadora de una cultura de trabajo y producción, en la que, sin duda, el Colegio Industrial tiene mucho que ver a lo largo de las décadas”, enfatizó el gobernador, dejando un agradecimiento a todos los que forjaron la historia del Industrial y a los que generaron tan marcado sentido de pertenencia.
Un hombre de la casa
Por su parte, el intendente Leonel Chiarella recordó su paso por el Colegio Industrial, donde incluso se desempeñó como presidente del Centro de Estudiantes, y especificó que, desde ese entonces, y antes aún, era un sueño de los estudiantes, y de la comunidad educativa, poder contar con un gimnasio propio para las clases de educación física y las prácticas deportivas. “Hoy esos sueños se hicieron realidad, no sólo este gimnasio, sino también el Taller, que ya había sido reinaugurado, entre otras remodelaciones”, valorizó el primer mandatario local, quien acotó que siguen adelante las gestiones para un pronto traslado de la subestación transformadora que hoy quedó dentro del gimnasio.
Sobre los orígenes del proyecto, recordó cuando los cooperadores escolares les comentaron la necesidad urgente de algunas reparaciones edilicias, sobre todo en los techos, al senador Lisandro Enrico y a él -por entonces concejal-, quienes poco después, durante una visita a la ciudad del gobernador Miguel Lifschitz, le trasladaron los planteos y la respuesta inmediata fue no sólo la aceptación, sino el compromiso de elaborar un “proyecto bastante más ambicioso”, en línea con la actitud del gobernador Hermes Binner cuando desde Venado, en una recorrida por el viejo Hospital, se le sugirió la idea de construir un nuevo edificio.
El intendente Leonel Chiarella fue alumno y presidente del Centro de Estudiantes del Industrial.
“Ahí empezó ese camino, y por eso le quiero agradecer al gobernador Perotti, porque no sólo se continuó ese proyecto, sino que se mejoró. Estas son las cosas positivas de la política, cuando las obras que se consideran beneficiosas para la comunidad, trascienden a las personas y trascienden a los gobiernos, que en este caso redundarán en una mejor educación técnica, en un espacio donde los jóvenes puedan disfrutar de mejores instalaciones para su formación”, cerró.
Una hermosa realidad
A su turno, el director de la EETP N° 483, Alejandro Baroni, compartió su emoción por la presencia de tantos miembros de la gran familia del Industrial, de todas las épocas, incluso algunos contemporáneos al profesor de Educación Física, César Villarroya.
Gran concurrencia de hombres y mujeres que forjaron la historia grande del Industrial.
En este sentido, el directivo destacó a Villarroya como “un ejemplo de ser humano y de profesional, a quien sus alumnos amaban” y reveló que apenas trascendió la posibilidad de construir el gimnasio, el exalumno y exdocente Augusto Bazzetti sugirió el nombre del joven docente fallecido en un accidente automovilístico cuando regresaba de un viaje a la ciudad cordobesa de Laboulaye por un torneo intercolegial.
Visiblemente emocionado, Baroni agradeció al conjunto de la comunidad educativa y aseguró que “es hermosa esta realidad y esto fue posible por nuestra historia, por nuestra identidad, y por eso hoy somos lo que somos, por ustedes, por los que estuvieron, por los que están y por los que vendrán”.
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