Jueves 28.5.2020
/Última actualización 19:33
El presidente Alberto Fernández sostuvo este jueves que para lograr "un país más justo" es necesario un nuevo régimen tributario y aclaró que el Gobierno no busca "perseguir a nadie, ni castigar a los ricos, ni esas ideas locas" de que el Estado se quede con las empresas.
Desde Formosa, en un acto que compartió con el gobernador Gildo Insfrán y en una conferencia de prensa posterior, el jefe de Estado también habló de una modificación del Impuesto a las Ganancias.
"Discutamos todo. Como muchos otros, cuando veo la parte de Impuesto a las Ganancias que aportan los que viven de un sueldo, digo esto está mal, y hay que corregirlo. No busquemos culpables. Está mal y hay que corregirlo", remarcó el mandatario.
Consideró que "cuando uno mira la recaudación y ve que el mayor ingreso es por el impuesto al consumo, que lo paga el pobre y el rico, es una injusticia".
El Presidente realizó las declaraciones como cierre de sus actividades en la provincia que empezó con una visita al Estadio Cincuentenario, cuyo predio fue acondicionado como hospital de campaña para la atención e internación de pacientes con casos leves de coronavirus.
ESTEBAN COLLAZO NOTICIAS ARGENTINAS FORMOSA MAYO 28: El presidente Alberto Fernandez, junto al gaobernador Gildo Insfran, y Fabiola Yañezvisito establecimientos sanitarios en esta provincia. Foto NAAl postular la necesidad de una reforma tributaria que abarque a la ley de coparticipación federal, hizo referencia - aunque sin mencionarlos- a los proyectos para que el Estado pueda tomar participación accionaria en empresas que reciban ayuda estatal y a la tasa a las riquezas.
"Tenemos la oportunidad de revisar todo porque la economía del mundo se dio vuelta. Está todo dado vuelta. No perdamos la oportunidad de escribir un sistema más justo", enfatizó Fernández.
En esa línea, el mandatario remarcó: "No es perseguir a nadie.
Aparecen esas las ideas locas de que queremos quedarnos con las empresas, que queremos castigar a los ricos. Queremos hacer un país más justo simplemente".
Advirtió que "ha quedado al descubierto que este capitalismo financiero dura diez segundos cuando aparece un virus" y expresó su esperanza para que una vez superada la pandemia "la economía empiece a funcionar a toda velocidad".
"No pienso en la velocidad con la que se reactiva la economía, sino en cómo se hace un país más justo", reafirmó y reiteró su idea de que es necesario "terminar con el centralismo".
En ese sentido, admitió que no está "feliz viviendo en un país que tiene una capital con un ingreso por habitante similar al de Bélgica y provincias con índices de países muy pobres", por lo que apuntó: "Eso está mal y hay que cambiarlo".
Indicó también que "hay otra forma de administrar el Estado, que es dándole más igualdad y oportunidades a todos los argentinos".