El presidente Alberto Fernández pidió hoy “ser muy estrictos, detectar y ser implacables judicialmente con quienes generan los incendios” en las islas frente a la ciudad santafesina de Rosario y “dañan el medio ambiente y la vida" de los ciudadanos, "que no deben soportar vivir con humo”.
Con este llamado, el jefe de Estado se refirió a los incendios y la problemática de los humedales, que provocó el reclamo de grupos ambientalistas de una ley que sancione a los culpables, durante un acto en Rosario para lanzar el programa "Detectar Federal" como plan de testeo masivo de coronavirus en el marco de la pandemia.
“Hoy Rosario también tiene el problema de los humedales y ese problema ha generado que muchas islas se incendien a veces por la seca, la baja del río o porque alguien lo hace intencionalmente”, planteó el mandatario en su mensaje.
Agregó que “ante esas quemas que padece Rosario, con una gran humareda" es necesario "trabajar para ver la manera de que nunca más se repitan en el futuro”.
Para ello, propuso “perseguir penalmente a los que generan esas quemas" y consignó que "hay que ser inflexibles porque esas quemas dañan al medio ambiente y la vida de los rosarinos”.
El gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, y el intendente de Rosario, Pablo Javkin, quienes acompañaron al primer mandatario en el acto, escucharon sus palabras desde la tarima que se armó sobre el césped del predio de la ex Rural de Rosario, cuidando la distancia social.
“Es cierto que hay una seca que ha favorecido esas quemas, que no solamente la padecen las islas frente a Rosario, sino también Córdoba”, dijo Fernández.
El Presidente se comprometió ante los funcionarios provinciales y municipales a “trabajar juntos" desde la Nación "para apagar los incendios" y ser "muy estricto y detectar" a quienes los generan y "ser implacables judicialmente”.
Ambientalistas se manifestaron, en tanto, frente al predio de la ex Rural de Rosario, en la previa del acto presidencial, para exigir una ley de humedales, y pronunciarse en contra del acuerdo porcino con China.
Unas 200 personas se dieron cita en el lugar para entregarle un comunicado al presidente Fernández, aunque no fue posible debido al operativo policial montado a 150 metros donde se realizó el acto, que detuvo el avance de los manifestantes.
Por eso, permanecieron en el lugar de forma pacífica, respetando las normas de aislamiento, para exigir con pancartas y bajo el lema “se defiende, la tierra no se vende”, una ley que proteja los humedales, que desde febrero se incendian a diario.
Desde el inicio de la cuarentena, se han quemado miles de hectáreas en la región, lo que sumado al daño que produce en el Delta, generó una gran contaminación en la ciudad santafesina.
En consecuencia, los ambientalistas exigen que junto al cese de los incendios, se encuentre a los responsables de las quemas y se los juzgue.
Los manifestantes apuntaron que estos hechos son intencionales y exhibieron fotografías de campos que se quemaron semanas atrás, pero que actualmente cuentan con maquinaria agrícola trabajando.
De esta forma, reforzaron la teoría de que los focos de incendio en las islas entrerrianas se originan con el fin de optimizar el terreno para la cría de ganado.
En ese sentido, los jóvenes pidieron que no se avance en un posible acuerdo con China para la comercialización de carne porcina y se evite un mayor deterioro del medio ambiente.