Susana Rueda
La intendenta de Rosario fue contundente sobre el reparto de esos fondos. “Ha sido histórica en los últimos años la discrecionalidad de los gobiernos con respecto a los ATN. Son 200 mil millones de pesos para repartir. Rosario nunca ha recibido ninguno”, aseguró.
Susana Rueda
Mónica Fein muestra una foto, con la cara iluminada. Es la de su nieto, que le cambió la vida, pero para el que no tiene demasiado tiempo. Casi todo el tiempo se lo lleva su trabajo: gestionar una ciudad de casi un millón de habitantes gobernada por el socialismo durante los últimos 27 años, en los cuales hubo escasos momentos de afinidad y buena sintonía con los distintos gobiernos nacionales.
“Yo siento la política y la gestión como un servicio público” dice, y asegura que no se cansa. La primera mujer que llegó a la intendencia de Rosario lleva 5 años y medio de gestión, y muchas polémicas y peleas a cuestas. La última, tiene que ver con la disputa por el reparto de los Aportes del Tesoro Nacional, que distribuye la gestión de Macri. La diferencia de aportes con respecto a la ciudad de Santa Fe provocó que salte la térmica en un año electoral con el escenario de la división en el Frente Progresista.
“Ha sido histórica en los últimos años la discrecionalidad de los gobiernos con respecto a los ATN. Son 200 mil millones de pesos para repartir. Rosario nunca ha recibido ninguno. Sólo cuando decidimos hacer la estación Rosario Sur, que nos ofrecieron algunos para hacer una estación de trenes. En este gobierno no habíamos solicitado ninguno pero planteamos el problema climático y nos avisaron que había 12 millones para Rosario y una cantidad muy superior para Santa Fe (fueron 152 millones), y otras ciudades. Este proceso discrecional le hace muy mal al sistema democrático. Los ATN deberían ir a la provincia, bajo un mecanismo transparente para manejarlo, en el marco de lo que son los ATN: para emergencias. Creo que es incorrecto la discrecionalidad sobre si esta ciudad sí o esta ciudad no, por estar más cerca o mas lejos de la relación política con cualquier gobierno nacional”.
—Sí. Lo han tenido antes y lo tienen ahora. Puede haber justificación en el marco de un problema climático, pero no hay una evaluación técnica. Me parece muy bien que se lo den a Santa Fe, que estaba complicado por las lluvias, pero nosotros también lo estamos y tenemos viviendas complicadas por el agua en las zonas más precarias. Que todos tengamos las mismas reglas de juego.
Coparticipación
Otro de los tironeos de la manta corta de los fondos nacionales, en un año electoral donde cada peso invertido y repartido se cuenta en votos, pasa por la deuda histórica de la Nación con las provincias por la coparticipación. Hay un fallo de la Corte que tiene varios meses, beneficia a Santa Fe, pero hasta ahora no se cumplió. Lifschitz exigió al gobierno nacional pronto pago. Y Fein también.
“Es dinero retaceado a la provincia y a los municipios. La verdad es que ganamos un juicio y es una barbaridad que el gobierno nacional no haya hecho un planteo de cómo va a cumplir con esa orden de la corte. Particularmente para Rosario son 1.600 millones de pesos. Yo escucho decir a algunos que la ciudad tiene un pasivo de 800 millones a corto plazo, y es porque entre otras cosas durante años nos retacearon recursos que eran nuestros. El gobernador está reclamando lo que nos corresponde”, destacó Fein.
—Rosario ha sido discriminada y hay un gran camino a recorrer para decir que no lo somos. Yo puedo decir que hoy diálogo con todos los ministros de la Nación, que hay una buena predisposición, pero cuando hablo con el intendente de Córdoba y me dice que hay un compromiso de dos mil millones para esa ciudad o el propio intendente de Santa Fe, y veo los anuncios de un segundo metrobús, de piletas olímpicas... Rosario está muy atrás de esos compromisos que la Nación toma con otras ciudades, sin embargo es una ciudad que aporta por las zonas de puertos muchísimos recursos a la Nación y, a su vez, una zona de inmigración que requiere de muchos recursos. No sé si la Cenicienta, creo que hubo una discriminación histórica quizás porque Rosario y la provincia de Santa Fe se han planteado en un carácter de discusión con los gobiernos nacionales de federalismo muy fuerte. Por eso fue a la corte y por eso exige un trato diferente. No nos arrodillamos frente al poder para que nos den lo que corresponde. Le exigimos con la autonomía de una ciudad y una provincia que merece los recursos que son nuestros.
Agenda local
—Así es como lo plantea la ley nacional. Nosotros hacemos muchos controles de alcoholemia y como resultado desde 2011 hasta ahora hubo 1.100 personas menos internadas en el HECA por accidentes. Pero incorporar narcolemia tiene dos objetivos, y uno es ser concientes de qué estamos hablando. Las cifras de la prueba son alarmantes con respecto a lo que sucede en la población. Es un llamado de atención para todos y nos interpela como sociedad. ¿Por qué manejar consumiendo sustancias? ¿Por qué consumir? El control tiene el objetivo de reducir la accidentología pero también provocar la reflexión de que los consumos generan problemas y debemos discutirlos.
—Yo puedo discutir esos índices. Por ejemplo, en provincia de Buenos Aires no sabemos cuáles son reales, hay un subregistro. Acá se cuenta no sólo el que muere en un hecho de violencia, sino también los heridos que se internan y mueren después. En el país, eso no se cuenta. Es cierto que nuestros datos son muy altos. Todo lo que está vinculado a la violencia está relacionado con el consumo de alcohol y de sustancias, porque esto potencia una relación diferente entre los ciudadanos. Por eso hay que abarcar el problema en su totalidad. En la prevención, en el tratamiento y en el debate en la sociedad. Porque el consumo de sustancias abarca a todas las clases sociales, no sólo a los pobres.
—Primero, reconocer que es un problema grave; segundo, rescatar lo que hemos avanzado. Los indicadores han disminuido, no todo lo que queríamos pero es un indicio de que vamos por buen camino. A través de varias cuestiones: hay que seguir profundizando el cambio en la justicia, en la policía, pero también en las políticas sociales, con el plan Abre, el Nueva Oportunidad y el Vuelvo a Estudiar. Yo rescato lo que hace la provincia con respecto a justicia y policía, pero sin políticas sociales de inclusión y oportunidades es difícil disminuir la violencia. Estamos muy lejos aún de lo que queremos alcanzar, pero estamos en buen camino.
—Estuvimos hace pocos días con la Sofse (Sociedad Operadora Ferroviaria) porque nosotros hicimos una estación para el tren en sur de la ciudad y el tren sigue tardando 7 horas entre Retiro y Rosario. Le pedimos que hagan un plan para que ese tiempo vaya disminuyendo. Hasta ahora no lo hicieron. Vamos a seguir reclamando porque es imposible de explicar que una ciudad como Rosario no pueda unirse a Buenos Aires en un tiempo máximo de 4 horas y media. Aumentamos el número de vuelos, hay un compromiso por mejorar la autopista, pero el tren está en una situación que es inaceptable.
Fein asegura que hizo y hace autocríticas. Que en cinco años y medio de gestión ha aprendido, como en la maternidad. Que en las últimas elecciones hubo un llamado de atención y se planteó un gabinete joven. Rechaza, además, el planteo de algunos concejales radicales (que entraron con el Frente Progresista) sobre falta de escucha y de diálogo. Asegura que todos son parte, que todos tienen un secretario en el gabinete. “Creo que se trata de procesos electorales y algunos buscan excusas para justificar sus posiciones en este proceso”, remata.
También rechaza con énfasis que el municipio tenga respuestas tardías en el arduo tráfico del centro rosarino. Enumera como logros de su gestión los carriles exclusivos, la tarjeta MOVI, los ajustes en recorridos de colectivos, la incorporación de nuevos sistemas para conectar barrios alejados, y define que el objetivo final es construir una ciudad diferente, donde las personas sean importantes y el transporte público colabore para peatonalizar las calles. Anuncia que el nuevo sistema de transporte que estará listo a fin de año va a cambiar el movimiento de la ciudad.
Política y candidatos
—Macri planteó en la última sesión del Congreso que venía a unir a los Argentinos, a terminar con la pobreza y a terminar con el narcotráfico. La verdad es que ha profundizado la grieta con los argentinos. Son expresiones del pasado, pero ancladas en “Yo o el abismo”. Es decir que no vino a unir a los argentinos, la pobreza aumentó, y si bien asumió la narcocriminalidad como un desafío mucho mayor que el gobierno anterior, está muy lejos aún de tener una política global para este tema. Yo creo que hay que analizar las palabras y los actos de un presidente. Y ver si cumple lo que promete.
Respecto al socialismo, Argentina necesita una experiencia que piense en las personas, que no se crea autoritaria y que no se lleve por delante a las instituciones, que gobierne con federalismo y para todos los argentinos. Y eso es lo que propone el socialismo.
—Todos sabemos y valoramos que el mejor candidato es Antonio Bonfatti. Fue gobernador e hizo una muy buena elección como diputado Provincial. Pero también creo que es respetable lo que piensa con respecto a terminar su mandato. Esa es la discusión a realizar. No está definido aún. En el gabinete de Miguel hay muy buenos ministros, como Contigiani y Balagué, que se han destacado y pueden ser buenos candidatos. Si yo tengo que opinar, creo que Antonio es el mejor.