El presidente de la AMIA, Amos Linetzky, advirtió que la causa judicial es "un fracaso humillante" para la Argentina y exigió que la Fiscalía Especial avance en el expediente judicial.
"No se ha podido atrapar ni siquiera a uno de los múltiples responsables de semejante atrocidad", dijo Amos Linetzky.
El presidente de la AMIA, Amos Linetzky, advirtió que la causa judicial es "un fracaso humillante" para la Argentina y exigió que la Fiscalía Especial avance en el expediente judicial.
"La herida todavía sigue sangrando. El dolor, como la fecha del calendario, es el mismo", sostuvo el titular de la entidad judía.
Al encabezar el acto central por el aniversario número 28 del atentado terrorista, Linetzky afirmó que "es muy difícil explicar todo lo que no pasó durante estos 28 años".
"No se ha podido atrapar ni siquiera a uno de los múltiples responsables de semejante atrocidad, los canallas, miserables y asesinos de 85 personas siguen disfrutando de su vida diaria, paseando por el mundo con total libertad. Cómo se explica tanta impunidad", planteó.
Y continuó: "La causa AMIA es uno de los reflejos más vergonzosos de la historia argentina, una de las grandes deudas de la democracia, una imagen que detestamos mirar porque nos muestra un fracaso humillante. Sigue transcurriendo el tiempo y continuamos sin avances de la investigación del peor atentado terrorista sufrido en nuestro país".
En ese sentido, el titular de la AMIA cuestionó al accionar judicial y se preguntó "¿cuándo fue la última vez que la Fiscalía Especial a cargo de Sebastián Basso y Gonzalo Miranda produjo al menos una novedad en la causa?".
"No estamos al tanto de que les hayan quitado recursos, entonces a qué dedican sus jornadas ocupando una de las fiscalías más grandes del país", señaló.
Linetzky remarcó que "está clara la responsabilidad en el atentado de los altos funcionarios del Gobierno israelí de aquella época, así como miembros operativos de Hezbollah" y recordó que "estas personas tienen pedido de captura internacional y no deberían poder salir de las fronteras de los países que los protegen".
"Los fiscales tienen la obligación de monitorear de forma permanente los movimientos de los acusados que tienen pedido de captura internacional y cuando abandonan Irán y El Líbano deberían ser arrestados", destacó el referente de la comunidad judía, quien luego se quejó de que los apuntados por la Justicia argentina "viajan libremente por distintos países".