El ministro de Gobierno Esteban Borgonovo firmó este miércoles una resolución para autorizar, finalmente, que se reanuden las visitas en las cárceles de la provincia. Según adelantó a El Litoral, la medida se hará operativa desde el próximo 23 de noviembre. La habilitación será progresiva y respetando estrictos protocolos que esencialmente exigen una persona por interno a visitar, y espacios al aire libre para la realización de los encuentros y contactos.
El funcionario destacó que fue posible adoptar esta decisión, gracias a una situación sanitaria controlada tanto en la población carcelaria como en el conjunto de los trabajadores penitenciarios. "Todas las medidas que se tomaron anticipadamente en el servicio penitenciario han dado muy buenos frutos. En Santa Fe hay más de 6.700 internos y hasta la fecha tenemos sólo 12 activos con Covid. Para que se entienda, Córdoba, para que se entienda, tiene unos dos mil internos más que Santa Fe, y cuenta con 600 infectados Los lugares de aislamiento aquí están prácticamente vacíos y no hemos tenido que usar los respiradores asignados y previstos", enfatizó.
Borgonovo sostuvo que "si tomamos en consideración que estamos atravesando el pico más temido de la curva epidemiológica y se está empezando a controlar la situación, podemos decir que nos sentimos muy satisfechos con los resultados de todas las medidas se adoptaron. Ese contexto es el que nos permite reestablecer las visitas".
En ese sentido, el funcionario aclaró que el regreso será de forma "gradual" y respetando los protocolos y las recomendaciones del área de Salud. "No queremos que toda esta situación muy positiva que hemos logrado hasta ahora, se ponga en riesgo", manifestó. Se deberán privilegiar para las visitas espacios con aireación, ventilación o al aire libre, y respetar los intervalos.
El ministro recordó que "los internos de la provincia están desde hace prácticamente ocho meses sin recibir visitas; esto merece un reconocimiento a todo el personal del Servicio Penitenciario en particular de sus autoridades, Walter Gálvez y Héctor Acuña", planteó.
Por último, destacó que también se fue superando el impacto de la pandemia en los agentes penitenciarios. "Llegamos a tener más de 500 agentes aislados pero afortunadamente todos evolucionaron bien; se ha hecho un gran trabajo también con los reemplazos de personal para que todas las unidades estuvieran funcionando por momentos con entre 400 y 500 personas menos que las que viene el servicio", concluyó.