Anunció que vendrán efectivos para la pacificación de la ciudad luego de los asesinatos de cuatro trabajadores en menos de una semana, continuará con el control en cárceles, y avance contra el lavado y desarme, y enviará una “ley anti bandas” al Congreso. Aseguró que la ola de violencia fue en represalia por el inicio de la Operación Bandera en diciembre, que bajó los niveles de delito. El gobernador recordó que se ofrece una recompensa millonaria por información sobre los autores de los ataques.
Antes del mediodía los ministros nacionales de Seguridad, Patricia Bullrich, y de Defensa, Luis Petri, el gobernador Maximiliano Pullaro y el intendente Pablo Javkin anunciaron en la Sede de Gobierno de Santa Fe algunos delineamientos de un operativo de saturación que se organiza en conjunto desde el comité de crisis creado la semana pasada, con una búsqueda de llenar las calles rosarinas de cuatro fuerzas federales y recursos de transporte y comunicaciones, en busca de “recuperar la paz social”.
La ministra Bullrich atribuyó la saga de asesinatos a los taxistas, el colectivero y el playero esta última semana como una respuesta del “narco-terrorismo” a las medidas que la Operación Bandera viene llevando a cabo, principalmente con la desconexión de los presos de alto perfil que impiden continuar controlando el territorio.
En ese contexto afirmó que el número anunciado más temprano por el presidente Javier Milei de 450 gendarmes es el correcto: “Este lunes por la noche llegarán los primeros efectivos federales para saturación a zonas de alto riesgo, y será con énfasis en los horarios críticos de 5 de la tarde a las 7 mañana”.
En este sentido, aseguró que “la gente va a comenzar a ver saturación en las zonas de alta densidad poblacional y en otras zonas puntuales”, y enumeró: “Están llegando Gendarmería Nacional, Prefectura Naval, Policía Federal y de Seguridad Aeroportuaria, y vamos a trasladar presos de alto riesgo a cárceles federales con un nuevo régimen de protección”.
En sintonía, el ministro Luis Petri había adelantado poco antes que “en las próximas 24 horas vendrán fuerzas, vehículos, ingenieros especializados con logística y comunicaciones para auxiliar las fuerzas nacionales y provinciales, con transporte táctico aéreo, terrestre o fluvial”. Y aseveró que es un trabajo que se realiza “coordinadamente para devolver la paz a los ciudadanos de bien”, ya que “las Fuerzas Armadas son garantes de la paz”.
Por su parte el intendente Pablo Javkin, quien inició la conferencia, aseguró que se pondrá de forma coordinada “todo el peso del Estado y en todos sus niveles, con todos los recursos y fuerza legal, facetas investigativas y de control penitenciario, son dispuestas a recuperar la paz y normalidad de la ciudad”.
Finalmente, el gobernador Maximiliano Pullaro prometió “trabajar para recuperar la paz y terminar con las mafias en la provincia, una determinación inquebrantable” y aseguró que mantiene comunicación permanente con los gremios y los sectores que por estos días cesaron sus actividades, como son los docentes, empleados de salud y choferes del servicio público de transporte (taxistas y colectiveros), amedrentados por los asesinatos de tres compañeros la semana pasada.
“Estos cinco hechos cobardes tienen una lógica. Quieren hacernos tener miedo y quebrar una determinación que tenemos”, calificó los asesinatos, que culminaron este fin de semana con el ataque al joven playero y la balacera al Order.
Entonces prometió: “Vamos a dar con los responsables materiales e intelectuales de cada una de esas causas”. Y recordó entonces que el Ministerio Público de la Acusación ofrece una recompensa de 10 millones de pesos para conocer quiénes ejecutaron esos hechos”. Finalmente agregó que lanzó “una convocatoria a todos los policías retirados para cubrir funciones operativas”.
Una ley "anti bandas", control en cárceles y contra el lavado y desarme
Entre sus anuncios Bullrich recapituló en torno a estos meses en que bajaron los delitos y homicidios en Rosario, que sucedió con el arribo de gendarmes y a que se puso en marcha dos programas en las cárceles que imposibilitó que se siguiera comandando delitos, y los presos de alto riesgo estén aislados, con la Operación Bandera.
Incluso aseveró que en ese contexto “Cantero, el jefe de los monos planteó ser de doble género para tener visitas de hombres, por fuera de sus familiares, y no le fue otorgado. Y fue esto lo que generó contracción de las bandas narco criminales”.
Fue en este sentido que la ministra apreció que al “achicarles el negocio generó las represalias con los ataques”, y lejos de modificar las medidas, aseveró que se acentuará en ese sentido: “Vamos a continuar esta estrategia: vamos a pedir la utilización de la Ley Antiterrorista con doble pena; enviaremos al Congreso una Ley Anti mafia o anti banda, nueva modalidad de persecución contra el crimen organizado, como hizo la ley anti mafia italiana y la de Estados Unidos”.
En paralelo destacó que “se avanzará sobre el lavado de activos, que está en los barrios de alta capacidad de la ciudad”, y en “operativos para sacar las armas” de la ciudad, ya que “se necesita terminar con el hormiguero, hormiga por hormiga no les ganamos nunca”.
Luego le habló a la ciudadanía rosarina prometiendo que junto al ministro Petri y las autoridades locales llevarán “una lucha sin cuartel para que Rosario sea liberada de narco criminales” y “proteger la vida de los ciudadanos con todas las fuerzas que tenemos”.