Santiago Balague
La diputada estuvo presente en los Tribunales venadenses para conocer la sentencia del juicio oral y público. A su vez, destacó el rol fundamental que tuvo el Gobierno provincial durante la gestión de Miguel Lifschitz para descubrir estas maniobras ilícitas para quedarse con campos, inmuebles y terrenos.
Santiago Balague
La diputada provincial del Partido Socialista, Clara García, participó este miércoles de la lectura de la sentencia en el marco del juicio oral y público conocido como “Megaestafa inmobiliaria”. En este marco recordó el rol clave que tuvo el Gobierno de Santa Fe, durante la gestión de Miguel Lifschitz, en detectar estos delitos y presentar la documentación en la Justicia.
Cabe recordar que el fallo del Tribunal integrado por los jueces Lenadro Martín, Eduardo Bianchini y Aldo Baravalle, condenó a Antonio Di Benedetto, considerado el cabecilla de la asociación ilícita, a 12 años de presión; mientras que al gestor Raúl Jaime y el comerciante Marcelo Sava recibieron una pena de 10 años, y 3 años y 6 meses, respectivamente.
“Hoy es un día muy trascendente para Venado Tuerto y para toda la provincia, porque finalmente se dio a conocer la sentencia de este juicio por la megaestafa inmobiliaria. Es la primera vez que la provincia de Santa Fe como querellante, presenta la documentación para avalar toda una asociación ilícita para quedarse con tierras, con campos, con propiedades y que participaron 'delincuentes de guantes blancos' entre abogados, contadores, escribanos y hasta médicos que falsificaban documentación. Se trató de toda una trama delictiva que se logró descubrir y poder hacer justicia”, expresó la diputada.
Seguidamente resaltó: “Recuerdo que durante la gestión de Miguel Lifschitz en el gobierno provincial, a través de Matías Figueroa Escauriza, quien estaba al frente del Registro de la Propiedad, quien realizó un control exhaustivo, también posibilitado por la incorporación de tecnología, descubren esta estafa”. Y disparó: “Uno puede tener un Estado que mira para el otro lado, que no controla o puede decidir, con valentía, a incorporar herramientas que permitan controlar documentación. Allí empezó a saltar diferentes situaciones en las cuales aparecían los mismos profesionales, operaciones con un mismo patrón, que llevaron a que la investigación avance con estos resultados”.